Estatut.- Terán lo considera "malo para Cataluña, peor para Cantabria y pésimo para España" y su final, "esperpéntico"

SANTANDER, 15 May. (EUROPA PRESS) -

El senador del Partido Popular por Cantabria Alberto Terán aseguró hoy que el nuevo Estatuto de Cataluña, que se someterá a referéndum el próximo 18 de junio, es "malo para Cataluña, peor para Cantabria y pésimo para España". Se trata, en sus palabras, de un "invento que nació mal" y en su desarrollo fue "de mal en peor", para terminar en un "final esperpéntico".

Respecto a su tramitación en el Senado, aseguró que se ha intentado que pasara de "puntillas, sin ruido y a toda velocidad" y, en cuanto a la intervención del presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, durante su debate en la Comisión General de Comunidades Autónomas, Terán consideró que estuvo "vacía de contenido, fundamentada en evasivas" y carente de "esfuerzo y análisis".

Para Terán, el Estatut es "malo para Cataluña" porque plantea un modelo "intervencionista" que contrasta con el "espíritu libre y emprendedor de la sociedad catalana"; es "peor para Cantabria", porque la región "nunca va a conseguir las cotas de financiación de otras comunidades autónomas"; y es "pésimo para España", porque "rompe el espíritu de la Transición y termina con los acuerdos mayoritarios entre fuerzas políticas".

Pero además de todo ello, denunció que el Estatut "cuestiona el modelo político territorial de España" y "globalmente es malo para todos" porque supone "romper el consenso, dar por terminado el espíritu de la transición" y romper con un "hábito", el de definir los modelos de financiación "por consenso y con acuerdos mayoritarios" en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).

Igualmente, criticó la "bilateralidad" de un Estatuto que implica "tratar de igual a igual, de tú a tú" a una comunidad autónoma y al Estado.

ZAPATERO, "RESPONSABLE ÚNICO"

A juicio del senador cántabro, pendientes de conocer aún el resultado del referéndum y tras una "nueva crisis" del Gobierno catalán, el Estatuto "va de mal en peor". "El máximo y único responsable" de ello es, según dijo, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que a pesar de afirmar en su día que aprobaría "cualquier reforma" que partiera del Parlamento catalán, al final, "con nocturnidad y a espaldas de Maragall" lo pactó con Artur Mas.

"Ha engañado a Cataluña, a los catalanes y a los españoles. Ha desautorizado al presidente de la Generalitat, ha traicionado el espíritu de la Transición y ha roto el consenso, para conseguir el primer estatuto de la división, el disenso y el desacuerdo", recalcó.

Terán criticó además que se haya tachado al PP de "anticatalán y frentista" y rechazó en cambio la actitud del PSOE intentando "encubrir o negar lo que dicen del texto algunos de sus protagonistas" y con el entonces portavoz socialista en el Congreso y hoy ministro del Interior, el diputado por Cantabria Alfredo Pérez Rubalcaba, "negando la mayor" y queriendo hacer "convertir lo negro en blanco".

LARGA VIDA AL ESTATUT

Respecto a la postura del presidente de Cantabria, el regionalista Miguel Ángel Revilla, quien en su intervención en el Senado deseó "larga vida" al Estatut, Terán rechazó las "formas" que tiene el jefe del Ejecutivo cántabro de "representar a Cantabria" y de "entender el Senado" y lamentó que Revilla "se despachó con evasivas", a pesar de tratarse de un proyecto de ley "muy importante, que puede tener consecuencias para España, para Cataluña y para Cantabria".

En su opinión, Revilla "perdió la oportunidad" de opinar sobre el Estatut "a la cara de Maragall, Artur Mas, Carod Rovira o Saura, los cuatro protagonistas" del mismo, y decir qué piensa de la definición de Cataluña como nación, del blindaje de competencias, la posible inconstitucionalidad, etcétera, en lugar de hablar de la Reconquista, el Proyecto Comillas o el Beato de Liébana.

"Parece que no le preocupa que España pueda tener 17 sistemas educativos, 17 sistemas judiciales o 17 sistemas tributarios" o "igual considera que es bueno lo que afirman los líderes catalanes: que es el punto de partida de un nuevo modelo de Estado", se preguntó el senador.

TRAMITACIÓN

Respecto al proceso que ha culminado con la aprobación del Estatut en el Senado, Terán recordó que se inició con el apoyo del 90% del Parlamento catalán, en lo que calificó de "días de rosas y cava", pero después en el Congreso sólo pudo recabar el 54% de los apoyos y en el Senado el respaldo se ha quedado en un 49,4%.

Según dijo, el Estatuto catalán nació de un tripartito en el que ICV introdujo el "espíritu intervencionista", ERC el carácter republicano, Pasqual Maragall el "sello federalista asimétrico" y, después, junto con CiU, se abrió una "pugna por ver quién era más nacionalista, catalanista o soberanista".

En el Congreso de los Diputados se modificaron 144 artículos en una "operación de puro maquillaje y manipulación" y el resultado fue un "embrollo político", envuelto además de "intrigas, artimañas, deslealtades y nocturnidad", prosiguió Terán, quien finalmente denunció que el trámite en el Senado se ha pretendido hacerlo "de puntillas, sin ruido y a toda velocidad".

"Todos aquellos que durante años han demandado una reforma del Senado para convertirlo en una cámara de auténtica representación territorial, cuando tienen una oportunidad de debatir el Estatut, desprecian absolutamente al Senado, que se ve privado prácticamente de debate", apostilló.