La FECAV rechaza la OLA en Castilla Hermida y pide al Ayuntamiento que cree aparcamientos disuasorios

SANTANDER, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Federación Cántabra de Asociaciones de Vecinos (FECAV) ha mostrado hoy su apoyo a los vecinos de Castilla Hermida que ayer rechazaron en una votación la implantación de la OLA (ordenanza limitadora de aparcamiento) en este barrio, y ha recordado al Ayuntamiento de Santander que esto no hubiera sucedido si cumpliera lo establecido en su Plan de Movilidad Sostenible sobre la habilitación de aparcamientos disuasorios.

"No se puede pretender empezar la casa por el tejado porque el resultado puede ser catastrófico y los vecinos de Castilla-Hermida, que son muy inteligentes deciden no pagar por un servicio que nadie les puede garantizar que lo van a recibir", ha aseverado el presidente de la FECAV, Ricardo Sáinz Obregón, quien ha apuntado que la implantación de la OLA en el barrio sólo beneficiará al concesionario de este servicio.

También ha señalado que "sería necesario que de una vez por todas se haga realidad la construcción de garajes para residentes, tantas veces demandados por la asociación de vecinos Los Arenales y tantas veces prometidos y olvidados".

Estos garajes construidos, junto con los aparcamientos disuasorios, "darían absoluta seguridad a los vecinos de poder aparcar cómodamente en su barrio, sin la competencia de los vehículos de quienes vienen a Santander a mil y una actividades".

Por eso, la FECAV ha instado al Ayuntamiento de Santander a que "asuma el compromiso de comenzar a resolver el problema de movilidad en la ciudad y el problema de la escasez de plazas de aparcamiento de una manera planificada, y no a salto de mata, empezando por el final".

"El Ayuntamiento debería haber esperado a poner las bases del Plan de Movilidad y haber escuchado las diversas alternativas que existen de aparcamientos regulados alguno mucho más interesante para los residentes que la oferta realizada a los vecinos de Castilla-Hermida y de otras zonas de la ciudad", ha opinado Sáinz Obregón.