SANTANDER, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Presidencia, Ordenación del Territorio y Urbanismo, Vicente Mediavilla (PRC), destacó hoy que el Gobierno es "el primer interesado" en conocer y en que los ciudadanos conozcan las causas del derrumbe parcial del Palacio del Mueble. El derribo del edificio (la parte con estructura de hormigón) comenzó al día siguiente del siniestro, el martes, y se estima que concluirá en un plazo aproximado de 10 días a contar desde el próximo lunes.
En el momento en que finalice el derribo se estudiará la situación de la parte más antigua del inmueble, que tiene estructura de madera, y cuya fachada está sujeta a protección, para determinar si procede su derribo o se opta por su rehabilitación. Además, Gobierno y Ayuntamiento de Santander "se sentarán" para analizar las posibilidades edificatorias que admite el Plan General.
Así lo explicó Mediavilla, quien rechazó "frontalmente" los comentarios que se han venido escuchando durante la semana según los cuales el Gobierno habría "propiciado" el derrumbe. Además, reiteró que no se había realizado ninguna obra, únicamente pruebas para analizar la consistencia de los pilares, entre ellas 93 ensayos de ultrasonido. El consejero aseguró que el descubrimiento de los pilares para realizar estas pruebas "en nada afecta" a su resistencia, y por lo tanto, no ha podido influir en el derrumbe.
Además, destacó que el último día que hubo personal haciendo mediciones fue el viernes y descartó la "hipótesis" de que alguien se hubiera "colado" en el edificio. Mediavilla se mostró convencido de que los ruidos que los vecinos dicen haber escuchado el sábado "no corresponden a ninguna actividad humana", porque durante el fin de semana "absolutamente nadie estuvo haciendo nada" en ese edificio, al menos con conocimiento del Gobierno y de la empresa pública Gesaican.
ESTUDIO DE LAS CAUSAS
El Gobierno ha encargado un estudio a una empresa especializada -Bureau Véritas- para conocer "en detalle" las causas del derrumbe, pero no le ha marcado "ningún plazo" de entrega porque considera que es más importante la calidad del informe que el tiempo. Como posibles causas se baraja, según explicó el consejero, el agotamiento de un pilar debido a su baja resistencia, en combinación con las condiciones meteorológicas, ya que en la madrugada del domingo se registraron en Santander rachas de viento de más de 117 kilómetros por hora.
Mediavilla afirmó que si el Gobierno hubiera querido "propiciar" el derrumbe del edificio, como se ha comentado, no habría estado un año y medio trabajando en la redacción del proyecto de rehabilitación integral, cuyas obras aún no habían sido adjudicadas, y habría solicitado al Ayuntamiento la demolición, ya que no está sujeto a protección y, por tanto, "no existía ningún inconveniente administrativo o jurídico".
Añadió que aunque el proyecto contemplaba el refuerzo de la estructura, su desplome no era "previsible en modo alguno". En este sentido, explicó que en los estudios previos a la redacción del proyecto se detectó que el hormigón presentaba una gran variación según los pilares y se constató que la mayor parte de los mismos deberían ser reforzados, como así se recogió en el proyecto.
Una vez decretada la ruina del edificio, la demolición comenzó el martes y al día siguiente se instaló una grúa desde la que se trabaja de forma similar a como se llevó a cabo la demolición del Edificio Winsor en Madrid. El resto del derribo será realizado por una pala retroexcavadora de dimensiones especiales que está siendo trasladada a Santander desde fuera de la región en piezas y que tendrá que ser montada 'in situ'.
AGRADECIMIENTO AL AYUNTAMIENTO
Por otro lado, el consejero trasladó al alcalde de Santander, Gonzalo Piñeiro, su agradecimiento y de todo el Gobierno por la "estrecha y absoluta colaboración" que el Ayuntamiento ha prestado al Gobierno y a las personas afectadas por el siniestro.
Según explicó, la mayoría de los afectados se han dirigido ya a la oficina de atención habilitada por el Gobierno en la calle General Mola, incluidos los propietarios de los siete vehículos dañados y de los comercios que se han visto obligados a cerrar temporalmente sus negocios. Ya se está procediendo a la valoración de los daños de los coches y se ha proporcionado vehículos de alquiler a los que lo han solicitado.
También se ha llegado a un acuerdo con dos restaurantes de la zona para la manutención de los vecinos desalojados, 23 en total, que están viviendo en unos apartamentos facilitados por el Ayuntamiento, aunque el Gobierno también ha puesto a su disposición otros apartamentos en Santander.
Aunque hasta que no termine la demolición de la parte nueva del Palacio del Mueble no se realizará una inspección "minuciosa" de los edificios colindantes (números 3 y 7 de la calle Alta), Mediavilla señaló que "al parecer", no han sufrido daños salvo en una terraza donde han caído escombros. No obstante, aseguró que cualquier daño que se haya producido "será objeto de resarcimiento".