SANTANDER, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los grupos ecologistas en el Parque Natural de Oyambre lamentaron hoy que el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y el consejero de Obras Públicas, José María Mazón, "sigan recreándose en sus agresiones al paisaje" y haciendo caso omiso de las propuestas presentadas en el Patronato del Parque Natural de para que sus actuaciones en materia de infraestructuras viarias adopten criterios "más respetuosos" con los escenarios que atraviesan.
En un comunicado, los ecologistas criticaron que las tipologías, diseños y tratamientos del entorno de los puentes recién inaugurados sobre las marismas de La Rabia y Zapedo "no pueden ser más desafortunados" al tratarse de "tableros de hormigón sin la más mínima intencionalidad estética" y con pilares "carentes del sentido de la escala", en los que no ha existido "preocupación alguna para contrarrestar su impacto".
Además, su construcción ha supuesto la destrucción de los restos del molino de marea localizado al pie del estribo y el arco de medio punto entre el dique y el viejo puente de Zapedo, así como la tala de plátanos centenarios en los bordes.
Estas actuaciones, continuaron los ecologistas, no han sido objeto de alegaciones ni de períodos de información pública, ni ha habido un concurso de ideas para contrastar o depurar propuestas o soluciones más adecuadas. Además, tampoco se han amparado en los informes de impacto ambiental que la Demarcación de Costas debería haber hecho al afectar los pilares a la franja marítimo-terrestre y a un ámbito competencial del Ministerio de Medio Ambiente.
En opinión de estas asociaciones, la Consejería de Obras Públicas debería dotarse de un equipo multidisciplinar que introdujese de forma "sistemática y rigurosa" las dimensiones paisajísticas y ambientales en las obras que realiza, y que recurriese con más frecuencia a la síntesis entre criterios puramente ingenieriles y los inspirados en la protección del patrimonio natural y cultural.
