Huelga.- El Parlamento aboga por "recuperar la normalidad laboral para restablecer la confianza y seguir negociando"

Actualizado: miércoles, 21 febrero 2007 22:40

El PP señala al Gobierno como el responsable del conflicto, mientras los socios de Gobierno denuncian el "chantaje" sindical

SANTANDER, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Parlamento cántabro abogó hoy por "recuperar el clima de normalidad laboral" en el Servicio Cántabro de Salud (SCS) para "restablecer el diálogo y la confianza" entre la Administración y los sindicatos convocantes de la huelga indefinida -Sindicato Médico de Cantabria (CESM) y Sindicato de Médicos Anestesiólogos (SIMAC)- con el fin de "seguir negociando y alcanzar acuerdos" que "fortalezcan" los derechos laborales en un marco de "sostenibilidad" del sistema.

En una propuesta de resolución aprobada en la Comisión de Sanidad con los votos de PSOE y PRC, la Cámara subraya que "la continuidad de la huelga pone en riesgo el derecho a la salud de los ciudadanos y va en contra de los principios que sostienen el sistema sanitario público" e insta al Gobierno regional a "poner en marcha todas las medidas legales y organizativas a su alcance para reparar el daño producido y garantizar las prestaciones".

La propuesta no pudo ser aprobada por unanimidad porque desde el PP se interpreta como una "artimaña prefabricada para que el Gobierno siga haciendo lo que está haciendo", cuando lo necesario, a juicio de la diputada 'popular' María José Sáenz de Buruaga, es instarle a que "redoble sus esfuerzos y disposición al diálogo" y exigir que el presidente, Miguel Ángel Revilla, y la consejera de Sanidad, Charo Quintana, se sienten a las mesas de negociación.

En estos términos se plasmaba la proposición que planteaba la oposición -rechazada por los grupos que apoyan al Gobierno-, en la que, además de pedir la intervención de Revilla y Quintana, se incluía una crítica a la gestión realizada por el Gobierno, junto con un reconocimiento explícito al "papel clave de los profesionales del sistema de salud" y un llamamiento a que las relaciones con ellos "se fundamenten en el diálogo permanente y la cooperación".

Con la aprobación de la propuesta de PSOE y PRC y el rechazo a la de los 'populares' se puso fin a un debate en la Comisión de Sanidad que se prolongó durante casi cuatro horas. Antes del debate de las propuestas, la consejera trasladó a los grupos parlamentarios, en nombre del Gobierno, una comunicación sobre la situación del conflicto.

En palabras de Quintana, este conflicto es una huelga "singular" con unas reivindicaciones "abusivas, corporativas e insolidarias", pero también "antiprofesionales", porque pretenden una carrera profesional "por antigüedad"; "antisindicales", porque aspiran a crear un "foro de negociación laboral exclusivo para médicos"; "debilitadoras de la sanidad pública", y que "transcienden lo puramente sindical".

A su juicio, la Administración está siendo "extorsionada y chantajeada" por los sindicatos utilizando "lo más sagrado", que son los pacientes, y criticó que los convocantes están dispuestos a mantener esa "extorsión hasta que se ceda en todo lo que se reivindica".

UNOS RESPONSABLES Y OTROS ALENTADORES

En cambio, Sáenz de Buruaga consideró que el verdadero responsable de este conflicto es el Ejecutivo, ya que la huelga es la "indeseable consecuencia de cuatro años" de acción política de un Gobierno "incapaz de dialogar, negociar ni acordar" y "es el Gobierno más que nadie quien tiene la obligación de garantizar el derecho a la salud y de poner fin a la huelga".

Al igual que la consejera, los portavoces de PSOE y PRC recalcaron que la huelga a estas alturas está "deslegitimada", acusaron a los huelguistas de "chantajear" al Gobierno y recriminaron al PP por "alentar" el conflicto, buscando con ello el "desgaste" del Ejecutivo.

El regionalista Rafael de la Sierra dijo que "el Partido Popular se siente a gusto con la huelga", que está aprovechando para "desacreditar" al Gobierno sin ofrecer "ninguna alternativa", mientras el socialista Martín Berriolope lamentó que el PP haya "optado por defender al 0,19% de los trabajadores" del SCS y por "darle duro al Gobierno".

REPARTO DE ESTRATEGIAS

Durante su intervención en la Comisión, la consejera lamentó que la oposición acudiera "con las gafas de mirar partidistas y demagógicas" y opinó que el PP "no aspira a gobernar Cantabria en la próxima legislatura".

Recordó que la Administración ha ofrecido a los sindicatos "más de lo que es justo" y les acusó de "repartirse las reivindicaciones, la estrategia de negociación y la imagen", de forma que el SIMAC asume una "imagen profesional, desligada de la medicina privada", pero engrosando al mismo tiempo y "sin rubor" el comité de huelga del Sindicato Médico, mientras este último "ni siquiera pretende disimular" y representa "claramente los intereses de la medicina privada".

Igualmente, criticó que "mantienen una segunda huelga", al "considerar que estar de servicios mínimos es sinónimo de hacer lo mínimo" y al "regatear, discutir e impugnar" esos mínimos, mientras hablan de atender a los pacientes que no pueden esperar más. "Eso es un reconocimiento expreso de que no están cumpliendo los mínimos, que obligan a atender todos los procesos urgentes y también los inaplazables. Es un triste intento de lavar su imagen", sentenció Quintana.

QUE LA HUELGA TERMINE YA

Frente a ello, Sáenz de Buruaga recalcó que a los ciudadanos "ya no les importa quién tenga más razón", sino que la huelga termine ya y, por ello, exigió la "inmediata intervención de los responsables políticos al máximo nivel", para poner fin al "despropósito" que ha sido la postura negociadora de la Administración, dedicada a dar "ultimátum, intoxicar e insultar" a los profesionales en huelga.

Asimismo, consideró que "el acuerdo es más barato y más beneficioso que la huelga" y acusó a la consejera de buscar en la Comisión el "bálsamo de la mayoría parlamentaria", olvidando su "grave responsabilidad, tratando de justificar su propia incapacidad y menoscabando el prestigio de los médicos" en huelga.

Finalmente, Rafael de la Sierra subrayó el "gran esfuerzo" realizado por la Administración y aseguró que la huelga está "deslegitimada"; y Martín Berriolope recalcó que "la sostenibilidad pasa por no ceder a las presiones" de un "grupo corporativo" como éste y por "no dar ni un paso atrás" frente a "presiones que tienen" un carácter "político".