El obispo concluye su primera visita pastoral tras recorrer durante dos meses la comarca de las Siete Villas

Actualizado: martes, 17 noviembre 2009 18:20

En la primavera de 2010 visitará la zona de Campoo y Valderredible "para conocer las gentes y las tierras del lugar"

SANTANDER, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -

El obispo de Santander, Vicente Jiménez, se ha mostrado "muy contento" tras culminar la primera visita pastoral que, como obispo, ha realizado en la Diócesis cántabra. Durante 25 jornadas alternas ha visitado los pueblos y parroquias de la comarca de las Siete Villas, en un área enmarcada entre la ría de Ajo y la ría de Treto, y entre el alto de Jesús del Monte y la Bahía de Santoña.

Han sido "momentos gozosos porque ahora también conozco las caras de bastantes personas de esta comarca" explicó Jiménez, quien destacó que así ha tenido "oportunidad" de acercarse "directamente a los fieles" para compartir sus "gozos y alegrías, sus preocupaciones y aprietos" en un tiempo "particular por la crisis económica que estamos viviendo". Igualmente, el prelado ha aprovechado para recordar las líneas del nuevo Plan Diocesano de Pastoral 2009-20014.

Jiménez adelantó que a partir de ahora efectuará dos visitas pastorales al año, la primera en otoño y la segunda en primavera. La próxima comarca eclesial a la que se desplazará, cuando concluya la Pascua de 2010, será la del Arciprestazgo de Nuestra Señora de Montesclaros, que engloba las comarcas de Campoo y Valderredible.

El calendario de la visita pastoral que acaba de culminar se inició el 27 de septiembre en Argoños y concluyó el domingo en la parroquia de Santa María del Puerto de Santoña. Tras una procesión de entrada, se celebró una eucaristía solemne con la participación de todos los sacerdotes de la zona y de numerosos fieles pertenecientes al arciprestazgo de Santa María, que es el territorio eclesial que ha visitado el prelado.

Durante este tiempo, Jiménez ha mantenido encuentros con movimientos apostólicos, catequistas y asociaciones, y se ha acercado a colegios, residencias de ancianos, enfermos, cementerios, centros de trabajo y fábricas.

También dedicó una jornada a visitar el penal de El Dueso, donde conoció los talleres en los que se forman los internos, y en Santoña acudió a la fábrica conservera Hoya. En Treto fue invitado a la empresa Robert Bosch.

"He comprobado la realidad del trabajo visitando fábricas e industrias donde el hombre de hoy trabaja y se afana, de tal manera que me llevo una grata impresión de esta primera visita pastoral", dijo.

Pero el obispo dijo sentirse "especialmente gozoso" por las visitas efectuadas a los enfermos en sus propias casas. Fueron encuentros "muy gratificantes para ellos pero también para sus familias y para mí", aseguró.

Por otro lado, resaltó "su agradecimiento" por la buena acogida de alcaldes y autoridades "que me han enseñado la realidad de sus municipios, su arte y peculiaridades". Además, precisó que el "pueblo creyente" respondió "muy bien" durante su periplo y destacó que el acto "cumbre" siempre fue la eucaristía.

En su visita pastoral Jiménez también constató "las dificultades con las que camina la Iglesia" porque en sus encuentros no hubo "la presencia de jóvenes deseada, quizás a causa de que ellos tienen una problemática especial". Pero, en general, ha habido una "respuesta aceptable y satisfactoria" por la que se siente "contento".