El Parlamento aprueba con los votos de PSOE y PRC el Plan de Residuos 2006-2010, que el PP considera "mediocre"

Actualizado: martes, 14 noviembre 2006 17:37

El documento persigue, entre otros objetivos, contener la producción de residuos urbanos para llegar a 2010 con el nivel de 2003

SANTANDER, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Comisión de Medio Ambiente del Parlamento regional aprobó hoy, con los votos del PSOE y el PRC, el Plan de Residuos de Cantabria 2006-2010, un documento de planificación que el PP considera "mediocre y decepcionante" y que persigue, como objetivos generales, la reducción del volumen de residuos generales; el reciclado, reutilización y recuperación de materiales y la energía contenida en los residuos; y el depósito o eliminación "segura y controlada" de los restos no aprovechables.

El plan aspira, entre otras metas, a estabilizar el crecimiento de los residuos sólidos urbanos (RSU), de forma que en el año 2010 la producción se mantenga en los niveles del año 2003. También se pretende estabilizar el volumen de residuos destinado a vertedero, de forma que en el periodo 2005-2008 se alcance el promedio del periodo 2001-2003, para a partir de ahí conseguir una reducción del uno por ciento anual hasta 2010, según informó el consejero de Medio Ambiente, José Ortega.

Otros objetivos cuantificados son el reciclaje o reutilización del 60% de los residuos de construcción e industriales; el reciclaje del 25% (en peso) de los neumáticos fuera de uso (NFU); y la valorización del 100% de los lodos de depuradora mediante la construcción de una planta de secado térmico provista de una instalación de cogeneración. Esta planta se está construyendo en Reocín y, según destacó el consejero, se encuentra en "avanzado estado" de ejecución.

El Plan de Residuos prevé además la mejora de la recogida selectiva de residuos a través de la instalación de puntos limpios en todos los municipios o áreas de influencia de más de 10.000 habitantes, objetivo que se extenderá a los municipios o áreas de influencia de más de 5.000 habitantes a finales de 2008, tal y como consta en la propuesta de resolución presentada y aprobada por PSOE y PRC.

"MEDIOCRE Y DECEPCIONANTE"

Por su parte, el PP solicitó la devolución del Plan de Residuos al Gobierno para que se subsanen las "deficiencias" que a su juicio contiene y se completen sus previsiones. La portavoz 'popular', María Luisa Peón, afirmó que es un documento "mediocre y decepcionante" con objetivos "escasos y de muy poco alcance" y con "errores de bulto" que denotan, en su opinión, "desidia y falta de interés".

Añadió que el plan ha estado durante dos años "durmiendo en el limbo de los justos" y afirmó que en ese tiempo, no se ha introducido "prácticamente ninguna modificación" respecto al primer documento elaborado en el año 2004. La diputada reclamó la actualización de la información sobre identificación y gestión de residuos, de modo que se incluyan los datos de los años 2004 y 2005; y la inclusión de una memoria económica que detalle las inversiones a realizar para cumplir cada objetivo y para cada anualidad.

Al mismo tiempo, Peón reprochó al consejero que el plan no haga mención al agotamiento del vertedero de residuos industriales no peligrosos de El Mazo, y reclamó concreción respecto a la ubicación del vertedero que lo reemplazará.

Ortega opinó que estas críticas se apoyan en "elementos absolutamente segundarios" y afirmó que el PP "exige al plan lo que el plan no necesita", ya que el documento contempla la elaboración de cinco planes sectoriales (para los residuos del sector primario e industrial, construcción y minería, residuos especiales y municipales y suelos contaminantes), cuya redacción ya se ha sacado a concurso.

Por su parte, los portavoces del PSOE, Javier García Oliva, y del PRC, Rafael Pérez Tezanos, destacaron la importancia de este plan, que viene a "solventar la carencia de planificación y el desierto normativo que arrastrábamos desde 1993".

Al mismo tiempo, consideraron "más que justificados" los dos años que se ha tardado en tramitar el Plan de Residuos, al que según señaló García Oliva, se han presentado más de 2.500 alegaciones que fueron contestadas en su totalidad. El portavoz regionalista añadió que al solicitar su devolución al Gobierno, el PP sólo busca "una demora" en su entrada en vigor.