El juicio se celebrará del 20 al 30 de noviembre en la Audiencia Provincial
SANTANDER, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía solicita un total de 105 años y seis meses de prisión conjunta y una multa de 11,3 millones de euros para 17 acusados de pertenecer a una red que traficaba en Cantabria y en toda la zona Norte, con alijos de drogas provenientes de Marbella. El juicio se celebrará del 20 al 30 de noviembre, en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria.
Las penas individuales solicitadas oscilan entre los 2 y los 9 años de prisión, estando acusados 16 de ellos de delitos contra la salud pública, dos de falsificación documental y uno de tenencia de armas de fuego.
Según el escrito del fiscal, Benito G.F., en prisión preventiva en la actualidad, y con domicilio en Gijón, acudía periódicamente a Marbella (Málaga), para "proveerse" de hachís y cocaína, que le suministraba el también procesado Mohamed E.H., quien se dedicaba a la venta de la droga "a terceros en el norte de España".
Los dos acusados concertaban sus encuentros para comprar la droga, "por vía telefónica", o "directamente" o, también "a través de las personas de confianza de Mohamed", los también acusados Evelyn Luisa M.R. y David G.G., ambos residentes en Marbella.
Para el traslado de los alijos, Benito G.F. se trasladaba a Marbella con los acusados Saturnino J.R., -también en prisión condicional, y con condenas anteriores por tráfico de drogas-, con Manuela V.A.., con Evelyn Luisa M.R., así como con Amalio Andrés M.C., alias 'Pocholo' o 'cowboy', quienes "se distribuían en varios vehículos para facilitar la impunidad del traslado y advertir la posible presencia policial".
Benito G.F. destribuía "en la ciudad de Santander la mercancía adquirida" en colaboración con los hermanos Saturnino J.R. y Luis J.R., así como con el tío de éstos, Gerardo J.L. y con Manuela V.A., los cuales "mediante llamadas a teléfonos móviles contactaban con los distintos compradores", "encargándose de las entregas" de la droga.
Habitualmente, los alijos de estupefacientes era depositadas en el domicilio de Gerardo J.L., en Cicero (municipio de Bárcena de Cicero), y en la casa de Ignacio P.M., alias 'padrino'.
Entre los habituales compradores de la droga proveniente de Marbella, que a su vez distribuían luego entre terceros, estaban Sergio M.V., César P.N. -alias 'cara pena', Francisco Javier B.P. -alias 'apañero', y Francisco R.C. -alias 'rey'-.
Efectivos de la Brigada Judicial de la Policía Nacional de Cantabria solicitaron judicialmente intervenciones telefónicas de algunos de los acusados, enterándose de que los días 27 y 28 de octubre de 2004, los acusados Saturnino J.R. y Gerardo J.L. "realizan distintas entregas de sustancias estupefacientes en las inmediaciones del Hotel La Rueda de Treto".
En fecha del 2 de noviembre de 2004, Gerardo J.L. realiza una "nueva entrega" en "el Parque de La Vaca de Santander", también previo contacto telefónico con los compradores.
La Policía detectó nuevos tráficos de droga el 3 de noviembre de 2004, en el domicilio de Saturnino J.R., de Santona; y el 9 de noviembre, en el centro 'Valle Real' de Camargo.
El fiscal también destaca en su escrito que el 8 de marzo de 2005, Saturnino J.R. y Manuela V.A. se desplazaron a Marbella para contactar con sus proveedores, y "preparar un nuevo traslado de sustancias estupefacientes hacia el norte de España".
Así, el alijo se trasladó hasta un domicilio en Maliaño y hacia Gijón, donde al día siguiente, se pusieron a la venta 813 pastillas alucinógenas.
Por autorización judicial del 13 de marzo de 2005, la Policía requisó diversos domicilios de la red en Gijón, Maliaño, Santander, Santoña, Cícero, Igollo y Baracaldo, encontrando diversos alijos de droga, revólveres, cartuchos, balanzas digitales, un machete militar, anotaciones contables, un bate de baseball, y un aparato de 'defensa' extensible.
