SANTANDER, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP de Cantabria, Ignacio Diego, afirmó hoy que el auto judicial que rechaza, por un defecto de forma subsanable, la querella de las tres trabajadoras despedidas de MARE contra el consejero de Medio Ambiente y el director de la empresa pública, "constata lo que el PP viene denunciando" desde hace tiempo, "que este Gobierno es un Gobierno mentiroso".
La oposición exigirá al Ejecutivo, por medio de una iniciativa parlamentaria, la "inmediata readmisión en sus puestos de trabajo originales" de los cinco trabajadores de la empresa pública "despedidos injustamente -dijo Diego- después de una persecución por su ideología política".
El líder del PP recordó que tanto el presidente regional, Miguel Angel Revilla, como la vicepresidenta, Lola Gorostiaga, y el consejero de Medio Ambiente, José Ortega, han afirmado en numerosos ocasiones que los despidos responden a una "supuesta reestructuración" de MARE.
Sin embargo, el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) constata en su auto "la contradicción existente entre la causa del despido (reestructuración de la empresa diseñada por la sociedad) y la contratación posterior de nuevos ejecutivos".
El TSJC estima que esta circunstancia, unida a "los antecedentes del despido (enfrentamientos políticos a causa de algunos contratos de personal directivo que culmina en el cese del director de MARE), hechos coetáneos al mismo (nombramiento del querellado Rafael Canales y remisión de la carta de despido a las querellantes -Elisa Polanco, Cynthia Andrés y Ana Pulgar- en la misma mañana de su toma de posesión); y los hechos posteriores (imputación en sede parlamentaria a las querellantes" de ser directivas que ocupaban puestos de confianza creados por el PP, "no permite descartar que la causa real del despido fuese la alegada por las querellantes", es decir, loa "fuerte proximidad ideológica al PP".
Para el TSJC, "todos estos hechos configuran una discriminación grave en el empleo por razones de la ideología de los trabajadores objeto de la misma". Aunque el tribunal rechaza la querella (porque el requerimiento denunciando el despido y su base debe ser judicial o administrativo, no notarial) declara al mismo tiempo su admisibilidad al considerar que "cumple en exceso el requisito de verosimilitud", puesto que se sustenta en "una abundante y clarificadora documentación".
"ACTO DE VILEZA"
A la vista de este auto, el PP se "congratula" porque entiende que el TSJC le da la razón en su argumento de que el Ejecutivo de coalición PSOE-PRC "es un Gobierno mentiroso". "El Gobierno persigue por razón de su ideología a los trabajadores, llegando incluso a su despido", un "acto de vileza" -denunció Diego- que evidencia su "verdadero talante y el sectarismo en el que está instalado desde el inicio de la legislatura", añadió.
Diego destacó que en su auto, el TSJC "relaciona" los despidos de las querellantes con la "presión política y mediática" derivada de los contratos "abusivos" del director y la responsable de recursos -"su amiga catalana"-, que posteriormente fueron cesados.
Al mismo tiempo, el líder del PP manifestó la "preocupación" de su partido por cómo actuó de oficio la inspección médica al citar a dos trabajadoras de MARE a las que no se pudo notificar el despido por estar de baja, a los 15 días de que la cogieran. "No conozco ningún precedente", ironizó Diego, quien descartó que fuera "una casualidad" puesto que las dos trabajadoras fueron citadas "el mismo día y a la misma hora" para "ver si la baja era justificada y razonable".
Sin embargo, al PP "no le consta" que la Inspección de Trabajo haya actuado como indica la Ley 42/94, de 14 de noviembre, en su artículo 13. Diego concluyó afirmando que su partido tiene la "sensación desagradable" de que el Gobierno "puso a trabajar a toda la Administración en contra de los trabajadores, y no precisamente para defender sus derechos".