SANTANDER, 18 Abr. (EUROPA PRESS) -
La portavoz de Presidencia y Justicia del grupo parlamentario Popular, Isabel Urrutia, ha planteado en la Comisión que tramita la Ley de Casas de Cantabria la posibilidad de que su grupo retire siete de sus nueve enmiendas que quedan vivas para el Pleno si los grupos que apoyan al Gobierno (PSOE y PRC) instan a éste a desarrollar en tres meses la ley y centralizan las aportaciones a las Casas de Cantabria en la consejería con esta competencia.
De aceptarse esta propuesta, el proyecto de Ley de Casas de Cantabria se aprobaría en sesión plenaria el próximo día 23, libre de enmiendas.
De las 25 enmiendas, 19 son de modificación y 6 de adición. Se modifican la exposición de motivos, se modifican o adicionan partes a 14 de los 22 artículos, se modifica la disposición final existente, y se adicionan una disposición final segunda.
Según ha explicado Urrutia, la intención del Grupo Popular con estas enmiendas ha sido "mejorar" el texto, tanto de la parte expositiva como de los artículos y la parte dispositiva. "Hemos querido mejorar también la técnica legislativa para que el texto que salga de este Parlamento sea el mejor posible", ha dicho.
Por otro lado, y según ha subrayado la diputada del PP, este grupo ha querido "corregir errores" del proyecto así como introducir propuestas de garantías, no sólo para la divulgación de la cultura y conocimiento de Cantabria fuera de sus fronteras, sino para que la relación de las Casas de Cantabria con la sociedad de Cantabria "sea de verdad", con las instituciones que representan la sociedad de Cantabria y tanto con los sectores de esta comunidad autónoma como del Gobierno.
Además, se profundiza en las garantías y derechos a los cántabros retornados a su tierra.
En cuanto a las siete enmiendas que retiraría el Partido Popular buscan entre otras cuestiones una modificación de la composición del Consejo de Casas de Cantabria, "para que sea de verdad sea un órgano de relación de las casas con la sociedad cántabra". Por ello, el PP quiere que la vicepresidencia primera la ocupe la presidenta del Parlamento y la vicepresidencia segunda un representante de las Casas de Cantabria.
Mientras, el Gobierno quiere que el presidente sea el presidente de Cantabria, y el vicepresidente el consejero en materia de casas. Según denuncia Urrutia, de llevarse a cabo, ni el Parlamento ni las casas tendrían representación en los máximos órganos de representación.
Finalmente, en las enmiendas que el PP pone como condición para retirar las anteriores se pretende, por un lado, que el desarrollo reglamentario se lleve a cabo en un plazo máximo de tres meses, y que las inversiones y subvenciones de la administración general se concentren en la Consejería que tenga las competencias de Casas de Cantabria para no dispersar la concesión de ayudas e inversiones, y así haya igualdad de condiciones y ninguna se vea desfavorecida.