SANTANDER, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente y vicepresidente de ARCA, Gonzalo Canales y José Ángel Herrera, respectivamente, han solicitado hoy la dimisión del alcalde de San Vicente de la Barquera, Julián Vélez (PP), por las nueva sentencias dictadas por el Tribunal Supremo (TS), respecto a la confirmación de la ilegalidad del proyecto de urbanización en Santa Marina, y a la desestimación del recurso de casación contra la negativa del Ministerio de Medio Ambiente a conceder la ocupación de 7.652 metros cuadrados de dominio público para construir el Polideportivo municipal.
Herrera afirmó en rueda de prensa que Vélez "debe de dimitir por higiene política y por dar un ejemplo ante los ciudadanos de que cuando se cometen tantos errores de tanto coste social, económico y ecológico para un municipio" este "desastre continuo de sentencias conlleva la asunción de responsabilidades políticas".
"Señor Vélez, si tiene un poco de dignidad política, debe de dimitir hoy mismo", añadió Herrera, tras recordar que ARCA emprendió acciones por la vía Penal contra el alcalde barquereño, dirigididas a la Fiscalía Anticorrupción, que se declaró incompetente, devolviendo el caso a la "Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria", instancia desde la que "no sabemos nada más".
Herrera destacó que los vecinos de San Vicente de la Barquera "no sólo van a tener que pagar de su bolsillo la demolición y pérdida del polideportivo", sino también de "todo lo concluido en el proyecto de urbanización Santa Marina", a lo que se suma que "llevan perdiendo desde hace ya prácticamente dos décadas las posibilidades de tener un desarrollo normal, como un municipio normal".
Concretamente, la sentencia del TS sobre el proyecto de urbanización de Santa marina, de carácter firme, confirma la ilegalidad de dicha construcción, sumándose a otra reciente por la que el mismo Alto Tribunal anulaba definitivamente el Plan Parcial con el que se pretendían construir 350 viviendas y un hotel dentro del Parque Natural de Oyambre.
Respecto a la otra sentencia, también firme, el TS desestima el recurso de casación interpuesto por el Ayuntamiento barquereño contra la sentencia de la Audiencia Nacional de 2002, que respaldaba la negativa del Ministerio de Medio Ambiente a conceder la ocupación de 7.652 metros cuadrados de terreno, reconociendo que "no hacía falta rellenar esa Marisma para hacer un polideportivo", explicó Canales.
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