Sanidad recurrirá la sentencia que exime de hacer guardias a médicos con hijos de corta edad, porque es "imprecisa"

SANTANDER 21 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Sanidad y Servicios Sociales del Gobierno cántabro recurrirá la sentencia dictada por el juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 3 de Santander que exime de realizar guardias a los médicos del Servicio Cántabro de Salud (SCS) para el cuidado de hijos de corta edad. La consejera, Charo Quintana, considera que la sentencia es "muy imprecisa, arroja incertidumbres y tiene sus claros y sus oscuros", por lo que recurrirán, "al menos para que se concrete" qué se entiende por hijos de corta edad.

En cualquier caso, Quintana se mostró más partidaria de analizar qué situaciones podrían ser motivo para exenciones de guardias. En este sentido, puso como ejemplos el ser mayor de 55 años, estar en periodo de lactancia o tener que cuidar de hijos pequeños o personas mayores. A su juicio, se deben ir "determinando" esos supuestos, pero sin que se utilice "como pretexto para otras situaciones que no buscan la conciliación".

Tras confesarse "firme partidaria" de la conciliación de la vida laboral, social y familiar, la consejera insistió en las "dudas" que plantea la sentencia, porque no concreta qué es "corta edad", una "imprecisión" que, a su juicio, "va a hacer que no prospere adecuadamente".

Además, consideró que el hacer guardias es "imprescindible" para los profesionales de atención especializada, porque en ellas se realizan actividades clínicas que no se efectúan en la "actividad ordinaria".

"Es muy difícil para los profesionales sanitarios de atención especializada, desde el punto de vista profesional, renunciar a la actividad que desarrollan en las guardias", agregó Quintana, quien destacó también que la remuneración de esas guardias resulta en "muchos casos necesaria".

Finalmente, señaló que de la sentencia "no van a poder aprovecharse nadie más que los profesionales que tienen consultas privadas" o trabajan en la sanidad privada, que pueden "renunciar a la remuneración de la guardia y que pueden estar mucho más interesados en no hacer una guardia y sin embargo continuar con su ejercicio profesional privado".