Tribunales.- 8 meses de prisión para el joven que hirió a su padre con una navaja y multa al herido por amenazas al hijo

Actualizado: miércoles, 4 febrero 2009 15:21

Según la sentencia, la víctima de la agresión había bebido y amenazó con un cuchillo al hijo, al que obligó a ponerse de rodillas

SANTANDER, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -

El juez del Juzgado de Instrucción número 1 de Santander ha condenado, a ocho meses de prisión, al joven de 20 años de edad que hace unos días agredió a su padre con una navaja, cuando ambos se encontraban en el domicilio de la víctima, en Santander. La sentencia también condena al lesionado, quien, antes de la agresión, había amenazado a su hijo con un cuchillo.

Según recoge la sentencia, hecha pública hoy, los hechos por los que ha sido condenado César M de D, de 20 años de edad, y sin antecedentes penales, ocurrieron en la noche del 30 al 31 de enero pasado, cuando el joven se quedó a dormir en el domicilio de su padre, y también acusado, César M.G., situado en la calle Camilo Alonso Vega de Santander.

La sentencia señala que la relación entre ambos estaba bastante deteriorada debido, fundamentalmente, a los comportamientos violentos que presenta el padre del procesado cuando consume bebidas alcohólicas.

Así las cosas, la noche de los hechos, el agredido estuvo bebiendo alcohol y sobre las 4,00 horas de la madrugada comenzó a adoptar una actitud agresiva y a hacer reproches a su hijo, diciéndole que era un mal hijo y otras frases similares.

En un momento dado, el hombre cogió un cuchillo y lo exhibió en actitud amenazante hacia su hijo, hasta que consiguió que éste se arrodillara en el suelo.

En esta situación, el joven, temiendo que su padre pudiera atentar contra su integridad física, cogió una navaja que se encontraba sobre una mesilla de noche y la dirigió hacia su progenitor, al que alcanzó en el cuello, causándole una herida incisa superficial de un centímetro de largo, que requirió tres puntos de sutura y tardará siete días no impeditivos en sanar.

Ahora la sentencia ha condenado al joven como autor de un delito de lesiones, con la circunstancia eximente incompleta de legítima defensa y la agravante de parentesco, a la pena de ocho meses de prisión, y prohibición de acercarse a menos de 300 metros y de comunicarse por cualquier medio con su padre durante el plazo de dos años.

El juez condena también al padre del procesado, como autor de una falta de amenazas, con la agravante de parentesco, y le impone el pago de una multa de 36 euros, así como la prohibición de acercarse a menos de 300 metros y de comunicarse por cualquier medio con su hijo durante un periodo de dos años.