La directora general de Integración de los Inmigrantes afirma que "el verdadero efecto llamada es la economía sumergida"
LAREDO, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
La directora general de Integración de los Inmigrantes del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales (MTAS), Estrella Rodríguez Pardo, señaló hoy en Laredo que la sociedad española "necesita inmigrantes" y destacó que "el reto es que estos inmigrantes que vivan y trabajen entre nosotros, sean considerados ciudadanos de pleno derecho. Todo esto sin el perjuicio del control de fronteras y de la ordenación de los flujos", apostilló.
Rodríguez Pardo participó hoy en el seminario sobre inmigración organizado en el marco de los XXII Cursos de Verano de la Universidad de Cantabria (UC) y aseguró que "necesitamos una inmigración que venga de forma ordenada y por los cauces legales. En primer lugar por el propio bien de ellos, que ahora se ven extorsionados por mafias y redes, que no sólo ponen en peligro su vida sino, además, económicamente el futuro de sus familias".
Las condiciones de entrada a un país de la Unión Europea con la intención de desarrollar una vida aquí, exigen la tramitación en el país de origen de un permiso de residencia y trabajo, pero este es un requisito que pocas veces se cumple, según expuso.
"Es un asunto muy complejo. Entiendo perfectamente que la persona que no tiene una perspectiva de futuro inmediato busque una vida mejor. Pero también creo que tenemos la obligación de regular el flujo migratorio, porque tanto la economía como el área de acogida tienen unos límites. Es importante para la sociedad española y para el propio inmigrante, que se juega la vida", consideró Rodríguez Pardo.
En este sentido aclaró que "eso no quita que España, dentro de la UE, se vuelque con estos países, pero con otro tipo de proyectos, como son los de cooperación para el desarrollo. Hay que saber encaminar las políticas. La política migratoria tiene que hacer que alguien pueda venir a nuestro país a trabajar y vivir con total garantía. Otra cosa es no reconocer las situaciones que están viviendo muchos países, sobre todo los subsaharianos", apuntó.
Por ello abogó por políticas a largo plazo para implementar en estos países emisores de inmigración.
'EFECTO LLAMADA' La directora general se refirió también al denominado 'efecto llamada' e indicó que "el verdadero efecto llamada es la economía sumergida; es que hay trabajo para personas sin documentación. Este es un efecto perverso que hace que las redes sigan invitando a venir a España a muchas personas aprovechándose de su necesidad", explicó.
La actual Administración se enfrenta se enfrenta a otros problemas como el de los inmigrantes que vienen con enormes diferencias culturales en materia de religión, educación, atención sanitaria o prácticas no comunes en España.
"El Plan Estratégico que estamos desarrollando y presentaremos al Consejo de Ministros parte de la igualdad. Esta es la idea central. Tenemos un marco constitucional y es ese, precisamente, el que obliga a autóctonos e inmigrantes", señaló Rodríguez Pardo, quien explicó que se reconocen una serie de derechos como a la educación, la libertad religiosa, el acceso a los servicios públicos, "y en estos conceptos centramos la clave ideológica del Plan", dijo.
Todo ello en el ánimo de garantizar una igualdad en el acceso a los derechos, pero también a las obligaciones. "En el aspecto privado una persona puede ser musulmana, católico, protestante o judío. Pero en el aspecto público hay una serie de valores y normas que hay que respetar", subrayó.
La representante del MTAS recordó que el Ministerio de Justicia creó recientemente un organismo para el diálogo con todas las religiones que hay en nuestro país. "No sólo es el intercambio de ideas, sino también la financiación de proyectos impulsados por esas religiones. Creo que esto es importante y es una forma permanente de diálogo", indicó.
Estrella Rodríguez Pardo se refirió, por último, a las políticas que se están llevando adelante en este momento para formar en interculturalidad a diversos sectores de la sociedad como pueden ser médicos, maestros, policías, bomberos, etc. "Esta es una de las claves, la formación de los funcionarios públicos para saber como tratar al que tiene delante", concluyó.
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