El Ayuntamiento de Santander concederá la Medalla de Oro de la ciudad a la universidad, como muestra de su "cariño y reconocimiento"
SANTANDER, 10 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) celebrará durante lo que queda de 2007 y el 2008 el 75 aniversario de su creación, mediante "una doble mirada" hacia su historia y hacia el futuro, según indicó el rector, Salvador Ordóñez, que anunció la creación de una fundación pública para "canalizar las aspiraciones de servir mejor a la sociedad a través de la mejor gestión de los recursos humanos, docentes y económicos".
Así lo indicó durante la clausura de los Cursos de Verano, presidida por la vicepresidenta del Gobierno de la Nación, María Teresa Fernández de la Vega, quien afirmó que el Gobierno colaborará a través de la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales en la celebración del aniversario y alabó la "calidad docente y un merecido prestigio internacional" de la Menéndez Pelayo.
"Las aulas de esta universidad han sido testigos y protagonistas de nuestro avance como país, de nuestra lucha por la libertad y el desarrollo", opinó la vicepresidenta, que enfatizó además la función "primordial en el progreso social" de la universidad en general, "un objetivo prioritario del Gobierno".
Al acto también asistieron el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla; el alcalde de Santander, Iñigo de la Serna; el presidente del Parlamento cántabro, Miguel Ángel Palacio, y el delegado del Gobierno en Cantabria, Agustín Ibáñez, así como otros representantes del mundo de la política, la empresa, la judicatura y el Ejército.
El alcalde de Santander anunció que promoverá "de manera inmediata" la concesión de la Medalla de Oro de la ciudad a la Menéndez Pelayo, como muestra del "cariño y reconocimiento del pueblo santanderino a la brillante trayectoria" de la institución, y se mostró convencido de que esta iniciativa contará con el "beneplácito" del resto de grupos políticos y de los ciudadanos.
Asimismo, ofreció la colaboración del Consistorio para la preparación de un programa de actos "a la altura de las circunstancias" en una "efeméride crucial para la universidad, pero también para la ciudad", ambas unidas "de manera indisoluble".
El rector agradeció al alcalde esta decisión, así como el "apoyo infraestructural" del Ayuntamiento de Santander para las actividades, que calificó de "básico", al igual que el "apoyo sin reservas" del Gobierno de Cantabria.
También el jefe del Ejecutivo cántabro aplaudió la decisión del alcalde y destacó la "simbiosis extraordinaria" entre "las instituciones de Cantabria y esta universidad", que cuenta "con enorme vigor" frente "a zozobras vividas en años pasados". En este sentido, consideró que la UIMP tiene "consolidado el futuro", gracias en parte a la labor de su rector, quien "se ha estrenado este curso con una matrícula de honor".
RECURSOS.
De cara al futuro y para que la Menéndez Pelayo siga siendo "un centro permanente de nuevas ideas y proyectos", el rector se propone crear una fundación pública, con el objetivo de "conseguir todos los recursos necesarios" para su actividad. "No cumpliríamos la responsabilidad del servicio que tenemos encomendada si no hiciéramos cuanto está en nuestras manos", enfatizó Ordóñez, quien recordó que el presupuesto de la Universidad se financia en "sólo" una "tercera parte" con subvención nominativa del Ministerio de Educación y Ciencia.
El resto procede de convenios con otras administraciones públicas, fundaciones, asociaciones y agrupaciones empresariales y financieras a quienes agradeció su "generosidad", tanto económica como "intelectual". "Su colaboración contribuye a que seamos la universidad española más próxima a la realidad económica, política y cultural de nuestro país", aseguró.
75 ANIVERSARIO.
Entre las actividades con las que la UIMP quiere celebrar su 75 aniversario, Ordóñez recordó el proyecto de Archivo Histórico de la UIMP, que consideró "sin duda, memoria intelectual del siglo XX" y "un incuestionable imperativo ético".
Este archivo estará compuesto por los propios fondos documentales de la Universidad, del Archivo Histórico Municipal de Santander, la Biblioteca Valdecilla de la Universidad de Cantabria, la Fundación Ortega y Gasset y los archivos de RTVE en Cantabria. El rector confió en sumar a estos archivos los de la Casa Museo Pérez Galdós de Las Palmas de Gran Canaria y de la Fundación Gregorio Marañón.
La historia de la universidad también se recordará con las exposiciones 'Las escaleras del saber', 'Rememorando amigos, amores y ausentes', 'Los carteles de la UIMP' y 'Ortega en la Magdalena'.
Los actos comenzarán mañana martes, con una fiesta con la que se pretende homenajear al personal de la casa que abordó la "renovación" de la Universidad en 1982, bajo el rectorado de Raúl Morodo.
Igualmente, el próximo curso incluirá, según detalló el rector, 14 actividades "imaginadas y dirigidas" por los jóvenes investigadores que han respondido a la convocatoria 'Imaginando: una mirada joven a la frontera del conocimiento', así como otros seminarios que abordarán "temas esenciales que preocupan a la sociedad".
Además, se incluirá, en colaboración con el Ministerio de Educación y Ciencia (MEC), una "novedosa" formación intensiva de inmersión lingüística en inglés, y se añadirán otros títulos de postgrado "avalados por grandes proyectos de investigación" como Consolider.
Otros de los objetivos establecidos para este aniversario son la rehabilitación de los pabellones residenciales de Las Llamas, la construcción de viviendas universitarias y la renovación "integral" de los sistemas informáticos de la universidad, mediante un plan que incluirá "campus y secretaría virtual, página web y bases de datos y comunicaciones".
'EXPORTACIONES MORALES'
Todos estos proyectos fueron esbozados por el rector durante la clausura de los Cursos de Verano, que contó con la lección magistral 'Ética para un mundo global', dictada por la catedrática de Filosofía, Moral y Política y consejera de Estado Amelia Valcárcel, que abogó por exportar "la innovación ética". "Necesitamos con urgencia no sólo las exportaciones técnicas, sino morales", recalcó.
Para Valcárcel, discernir "si es posible una ética global" supone "un gran desafío", teniendo en cuenta que el ser humano se está "acercando al final de una era". Según explicó, "durante un tiempo las civilizaciones han podido vivir sin encontrarse", pero "ahora no es posible".
La catedrática señaló que en la actualidad se da "el efecto mariposa, pero esta vez de verdad, el económico", ya que "cada cosa que pasa en un sitio repercute en los demás". Por este motivo, apostó por el ejercicio de "una prudencia moral" y "en los momentos actuales, una prudencia política" para "afinar la visión sobre la historia" y el "delicado" momento actual", en el que se hace necesario "contribuir aunque sólo sea a crear el hueco de la idea en el que se desarrolle la ciudadanía mundial", con especial atención "a las mujeres".
