UIMP.-López Aguilar dice que "no hay que bajar la guardia" respecto a ETA, porque "está todavía viva" y habrá obstáculos

Actualizado: miércoles, 19 julio 2006 16:21

Apela a la "prudencia" de las fuerzas políticas, y destaca que es "una oportunidad histórica" para "poner punto y final" al terrorismo SANTANDER, 19 Jul. (EUROPA PRESS) - El ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, abogó hoy en Santander por que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y la ciudadanía en general, mantengan "la guardia muy alta" pese al proceso de diálogo que se ha abierto con ETA, porque éste "será largo" y la banda "todavía está viva". López Aguilar, quien esta mañana en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) atendió a los medios justo antes de intervenir en el curso sobre 'Gobierno, política y poder judicial', hizo estas declaraciones al ser preguntado por la posibilidad de que los gobiernos central y vasco mantengan los escoltas a los jueces hasta la consolidación del proceso de paz. Según el ministro, las conversaciones con ETA "van a ser largas" y "no se van a solventar en 24 horas" por lo que, en su opinión, sería "insensato" el que "nadie invitase a bajar la guardia" frente al terrorismo.

En este sentido, recalcó que el proceso de paz "no tiene todo a favor" sino que tendrá que hacer frente a "muchísimas dificultades" e "incidencias", y deberá "sortear" numerosas "recovecos y obstáculos" en su camino. "Evidentemente debe mantenerse la guardia alta, y garantizar la seguridad de los españoles frente a esta organización terrorista que está viva", insistió López Aguilar, quien enfatizó la necesidad de que los jueces españoles y extranjeros "continúen haciendo su trabajo conforme a la ley". 'CONFIANZA' No obstante, López Aguilar incidió en que en esta ocasión España "tiene una oportunidad histórica" para "poner punto y final" al terrorismo de ETA, en unas "coordenadas" que, a su entender, "objetivamente son mejores que las que nunca se ha tenido en la historia de la lucha antiterrorista". En este sentido, dejó claro que el Gobierno de la nación piensa "cumplir al límite de sus capacidades" y "con su mejor voluntad" su "deber" que, según aseveró, es "el de poner punto y final, de forma irreversible y definitiva, a esta historia siniestra de terrorismo en los últimos 30 años". Por ello, tachó de "deplorable" la actitud de "otra fuerzas políticas que han tenido responsabilidades de gobierno" y que, según subrayó, están "intentado sembrar la desconfianza" y "crear más dificultades" en el proceso "de las que ya de por sí hay".

Como consecuencia, pidió "prudencia" y "mesura" a la oposición, y apostó por que "nadie intente sacar rédito electoral" de este proceso de diálogo, que calificó "de interés general".