Advierte que "lo peor de la crisis no ha pasado" e indica que Castilla-La Mancha perdió 788 autónomos en enero de 2010
TOLEDO, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de ATA Castilla-La Mancha, Rosario Moreno-Opo, reclamó hoy una reforma de la ley de morosidad encaminada a acortar los plazos de los impagos y a establecer procedimientos judiciales y burocráticos contra la morosidad, ya que, según advirtió, "uno de los principales problemas de los autónomos está siendo la deuda que generan las Administraciones Públicas".
"Se tiene que cambiar la ley de morosidad para que se acorten los plazos de los pagos, así como establecer procedimientos judiciales y burocráticos para que en caso de incumplimiento agilicen el cobro de estas facturas", dijo en rueda de prensa la presidenta de ATA en la región, que puso como ejemplo a la Xunta de Galicia, que reducirá a 45 días el pago de deudas a autónomos.
Moreno-Opo insistió en este sentido en que "se necesitan estas medidas" puesto que "uno de los principales problemas de los autónomos está siendo la deuda que generan las Administraciones Públicas", advirtiendo que en algunos casos un autónomo puede llegar a esperar entre 340 y 365 días para cobrar. "Esto a un autónomo le puede suponer la ruina", enfatizó.
En líneas generales, la presidenta de ATA esbozó lo que a su entender deberían ser las líneas de actuación: reestructuración de las líneas de financiación a autónomos a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO) o entidades privadas, reactivación del consumo, rebaja de impuestos e incentivos fiscales.
Moreno-Opo apuntó que en 2009 todas las provincias, excepto Cuenca, tuvieron pérdidas de afiliación y de tejido productivo similares a la media nacional, especialmente Toledo por estar muy vinculada al sector de la construcción y empresas auxiliares. "Pero no pensemos que lo peor de la crisis ha pasado", agregó la presidenta de ATA Castilla-La Mancha, quien indicó que enero también muestra una tendencia de pérdida en el número de afiliados.
Así, señaló que el número de autónomos en la región durante le primer mes del año descendió en 788 trabajadores, pasando de 150.484 afiliados en diciembre de 2009 a 149.796 en enero de 2010, siendo Toledo la provincia que lideró las pérdida de empleo autónomo con 271 emprendedores menos. "Uno de cada tres autónomos que ha perdido Castilla-La Mancha durante el mes de enero era de Toledo", apuntó.
Por sectores de actividad, siguiendo con la tendencia de los meses anteriores, la construcción (-1,7%) y el comercio(-0,5%) fueron en el primer mes de 2010 los que registraron mayores descensos, con 452 y 108 autónomos menos, respectivamente, y acapararon el 33 por ciento de las bajas de autónomos en Castilla-La Mancha, destacando que en Toledo los autónomos de la construcción representan seis de cada diez bajas, el 58,8%.
Así, señaló que la tendencia de pérdida continúa pese a que Castilla-La Mancha llega "18 meses" perdiendo trabajadores por cuenta propia y la perspectiva para 2010 "no es buena". "Creo que podemos hacer algo más. Es necesario que la Junta cuente con nosotros y apoye nuestras propuestas porque conocemos cuál es la tesitura en la que se encuentran el autónomo", subrayó.
"AGUANTAR EL TIRÓN"
En este sentido, admitió que "resulta muy difícil tener que decir a un gran número de autónomos que a día de hoy no existe solución" y por ello reclamó que la Junta retome el plan que activó hace cuatro años "con un programa ambicioso". A su juicio, urge adoptar "medidas financieras, que fomenten el empleo, para que el colectivo de los emprendedores vuelva a generar riqueza y empleo".
Según aseguró, la situación "a día de hoy" es de "aguantar el tirón" y reparó en que las dificultades para acceder a la financiación por autónomos siguen siendo las mismas. Aseguró así que los trabajadores por cuenta propia tienen un "99 por ciento" de posibilidades de que los bancos respondan 'no' a su petición de crédito pese a las necesidades de liquidez del colectivo.
Por último, preguntada por la propuesta del Gobierno de retrasar la edad de jubilación a los 67 años, la presidenta de ATA consideró ésta una medida "coherente" siempre y cuando se reduzca la tendencia a las prejubilaciones en España para que "todo el peso no recaiga sobre el autónomo", que, según dijo, suele retrasar su jubilación para continuar con el negocio después de los 65 años.
