El Ayuntamiento de Cabanillas del Campo (Guadalajara) colabora con el Comercio Justo

Actualizado: domingo, 29 enero 2006 19:24

GUADALAJARA, 28 Ene. (EUROPA PRESS)

El Ayuntamiento de Cabanillas del Campo (Guadalajara), junto con el Consejo Local de Cooperación, los cuatro centros escolares de la localidad y Comercio Justo han puesto en marcha una campaña de distribución de las cajitas quitapenas.

Estos productos, procedentes de Guatemala, están elaboradas en madera, pintadas a mano, y en su interior albergan pequeños muñecos confeccionados a mano.

Las cajitas quitapenas, informó el Ayuntamiento, estás elaboradas por la Organización Uhatezmala, una cooperativa que agrupa artesanos del norte y centro de Guatemala, principalmente dedicados al trabajo del cuero y textiles.

Todas las cajitas llevan en su interior, además de seis muñecos, la leyenda que les ha hecho conocidos en Guatemala y en otros países. Ésta cuenta que cuando se tenga un problema, se cuenta a un muñeco y se coloca debajo de la almohada, con lo que mientras uno duerme los muñecos alejan los problemas.

La realidad es que estas cajitas están elaboradas con los criterios del Comercio Justo, por lo que se respeta el salario justo para el productor, las condiciones laborales dignas y los derechos de los trabajadores, la ausencia de niños en el proceso de producción y se garantiza igualdad entre sexos dentro de la cooperativa productora.

Esta campaña, que se ha desarrollado durante las últimas semanas en Cabanillas, viene precedida por un éxito de más de seis años en Azuqueca de Henares. La idea del proyecto es vender estos productos a un precio muy asequible, 1 euro, en los colegios e institutos para que los estudiantes puedan tener acceso a ellos. Para que el precio sea tan asequible, el Ayuntamiento colabora con 1 euro, que se suma al euro de los estudiantes, mientras que el resto del coste lo asume la cooperativa que trae los productos.

De esta manera, en la iniciativa colaboran tres sectores sociales, como son la sociedad civil (los alumnos), administraciones públicas (el Ayuntamiento, que costea parte del precio del quitapenas) y las organizaciones de Comercio Justo, que también subvencionan parte del precio final, así como los gastos derivados de la importación de productos.