TOLEDO, 14 Mar. (EUROPA PRESS)
El vicesecretario regional del PP, Alejandro Ballestero, afirmó hoy que a la debilidad del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero ante el "nacionalismo radical" en sus dos años de mandato se suma la del presidente regional, José María Barreda al propio Zapatero, algo que centró en cesiones en materia de agua, el problema creado sobre si "somos España o no", un sistema de financiación que ha abierto "la Caja de Pandora de desigualdades", y el "claro" desprecio a las víctimas del terrorismo de ETA y del 11-M.
En rueda de prensa, Ballestero se refirió a dicha debilidad basándola en aspectos como el problema que "nos han creado y no había en este país" sobre "quiénes somos, que nación somos". Hoy, en España por Zapatero y la cesión "de muchos presidentes autonómicos" en la región y en España, tenemos que estar abiertos al debate sobre "qué somos o qué no somos", "si somos España o no", ya que hay aprobado un Estatuto en Comisión que dice "que Cataluña es una nación".
Asimismo, el vicesecretario del PP de Castilla-La Mancha indicó que "con un silencio cómplice en el Consejo de Política Fiscal y Financiera" de Barreda, a partir de ahora se exige que Cataluña tenga una financiación en siete años para compensar su "deuda histórica" en infraestructuras, "ojo al tema", ironizó.
Por ello, consideró que con este nuevo sistema habrá que ver como cubrir en el futuro, por ejemplo, las prestaciones sociales, y confirmó que se ha abierto "la Caja de Pandora de las desigualdades en España con este sistema de financiación".
Ballestero resaltó además que en estos dos últimos años de gobierno socialista hay "un claro desprecio" a las víctimas del terrorismo de ETA y del 11-M, y una "separación evidente" entre las víctimas de cualquier terrorismo. Se ha evidenciado un alejamiento de aquellos "que son la columna vertebral de la moralidad de nuestro país y deben serlo".
Por tanto, se ha evidenciado una falta de respeto y "un desprecio inadmisible" dándose "un cambio radical en la política terrorista" y así, se refirió por ejemplo al cese de Fungairiño, a la presencia de Batasuna en el Parlamento Vasco, o a los actos de homenaje a terroristas que se realizan, y se preguntó "si esto no es un cambio".
También se ve debilidad en las cesiones en materia de agua, recordando las soluciones globales y solidarias al problema de este bien planteado por el PP y fue el presidente de ERC, Josep Lluis Carod Rovira, quien propuso que el río Ebro, que solucionaba los problemas de la España seca "tuviese que ser para los nacionalistas", y Barreda, que meses antes había dado su "visto bueno" al PHN "cambió" sin explicaciones y sin "ningún tipo de pudor".
Así, el presidente regional "nos ha hipotecado en materia de agua" y todo lo que está ocurriendo desde entonces en la región "tiene que ver con eso", confirmando que "se miente cuando se intenta desviar la atención" y se confunde intencionadamente al ponerse "uno a hablar que si Murcia, que si no".
Recalcó que tanto Zapatero como Barreda tienen claro en su manera de gobernar que "el sillón es lo único" afirmando que quieren permanecer en el poder "a toda costa", y por encima de todo "solo se deben a los intereses de su partido" y no a los de sus gobernados, lo que, a su juicio, les convierte en débiles ante el nacionalismo radical. En este sentido, a pesar de que Barreda dibuja una comunidad "de Alicia en el País de las Maravillas", la realidad "es bien diferente".
SE VA A PEOR Y EL FUTURO ES INCIERTO
Dijo que lo que hay que preguntarse es "si estamos mejor" y los problemas se van arreglando, confirmando que si se realiza esta cuestión en la región, la inmensa mayoría, en su opinión, "tendrá una percepción clara de que no solo nos va peor, sino que además el futuro es bastante incierto" y cada día "más".
Ballestero afirmó que los castellano-manchegos "estamos desencantados" por no saber "donde nos pretende llevar el señor Zapatero" ya que el Gobierno parece que "va sin rumbo", y confirmó que la percepción compartida por los españoles y castellano-manchegos es que Zapatero "lleva dos años entregado al nacionalismo radical".
Así, dijo que con ello está perjudicando claramente a "los que creemos en una España solidaria y unida" y por ello, resumió estos dos años en el "entreguismo, la cesión y ese arrodillarse" para perjudicar los intereses de los que creen en un modelo de España solidario, de un país unido y en convivencia, concluyó.
