TOLEDO, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
Siete de cada diez castellano-manchegos están satisfechos con su sanidad pública, ya que creen que funciona bastante bien o bien, aunque necesita algunos cambios. Además, puntúan con un 7,25, en una escala de 1 al 10, la calidad de la atención sanitaria recibida en términos globales.
Estos son algunos de los principales resultados del último barómetro sanitario elaborado por el Gobierno de Castilla-La Mancha correspondiente a noviembre de 2008 y que fueron dados a conocer hoy por el consejero de Salud y Bienestar Social, Fernando Lamata.
El estudio fue realizado entre los días 3 y 21 de ese mes, con una entrevista telefónica a 1.607 castellano-manchegos, estratificada esa muestra de población por área de salud y tamaño de hábitat. Para el consejero, este importante tamaño de la muestra permite obtener una radiografía clara de la opinión que en la actualidad tienen los ciudadanos de su sanidad pública.
En ese sentido, los castellano-manchegos valoran con un notable alto la atención recibida por parte de los profesionales tanto sanitarios como no sanitarios, informó la Junta en nota de prensa.
Las puntuaciones alcanzan un notable en casi todos los indicadores tanto en el trato y el cuidado recibido y el tiempo dedicado; como en la confianza y la seguridad que transmiten los profesionales, y la información que proporcionan a los pacientes.
El consejero felicitó a los más de 25.000 profesionales del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha por estos buenos resultados, que reflejan su compromiso diario para ofrecer una asistencia de calidad, moderna y muy cercana al paciente y a los familiares.
Otros aspectos que valoran de manera muy positiva los castellano-manchegos son la limpieza de los centros y los horarios de visitas a los pacientes y las facilidades para la permanencia de los familiares junto al enfermo.
Los aspectos que reciben una puntuación de aprobado alto son los tiempos de espera para ingreso no urgente (5,76), la comodidad y privacidad de las instalaciones 86,35) y el respeto a la intimidad de los enfermos (6,56)
En cuanto a la frecuentación del sistema sanitario, en el último año el 74,6% de las personas consultadas ha visitado una consulta pública de atención primaria; y el 45,1% ha visitado una consulta pública de atención especializada. En los últimos tres años, un 35% ha acudido a un hospital público para ingreso, de él mismo o de algún familiar.
AVANCES
En su intervención, Lamata señaló que estos resultados del barómetro sanitario de noviembre de 2008 pueden ser comparados con el elaborado en noviembre de 2000, cuando la gestión de la asistencia sanitaria correspondía en esas fechas al Gobierno de España, para comprobar cómo ha evolucionado en los últimos ocho años la opinión de los castellano-manchegos sobre su sanidad pública, especialmente desde que esa competencia la asumió el Gobierno regional en enero de 2002.
Para el consejero, esa comparativa refleja, sin lugar a dudas, la mejora en la asistencia sanitaria que ha tenido lugar desde que Castilla-La Mancha asumió las competencias sanitarias.
Así, los castellano-manchegos que piensan que su sanidad pública funciona muy bien o bien ha aumentado 6,5 puntos desde el año 2000 (de 62,4 a 69%) y ha bajado 3 puntos en aquellos que piensan que son necesarios cambios fundamentales (27,9 a 24,9%)
En noviembre de 2000, hace ocho años, los castellanos-manchegos puntuaron en una escala de 1 al 10 con un 6,64 la calidad asistencial recibida, seis décimas menos que ahora, que se sitúa en 7,25, un notable alto.
Por otro lado, el consejero manifestó que los castellano-manchegos disponen de una sanidad pública que se sitúa por encima de la media nacional en los principales indicadores asistenciales si se comparan los datos del barómetro sanitario de noviembre de 2008 con los del último barómetro sobre el Sistema Nacional de Salud elaborado por el Ministerio de Salud y Consumo correspondiente a 2007.
INFORMACIÓN SANITARIA
Sin embargo, el consejero señaló que en el barómetro sanitario se recogen opiniones que advierten a la Administración sanitaria de la necesidad de mejorar algunos aspectos de la gestión de la sanidad pública.
Así, los ciudadanos sigue manifestando una opinión más crítica hacia los aspectos relacionados con la información que facilitan los servicios sanitarios públicos.
Valoran con un aprobado ajustado la información que da la administración sanitaria sobre los servicios que presta (5,16); la recibida a través de las campañas dirigidas a la población sobre los principales problemas de salud, (5,48), o la disponible sobre qué trámites realizar para acceder al especialista o ingresar en un hospital (5,39).
Incluso, suspenden la información disponible acerca de los derechos y vías de reclamación de que disponen los usuarios (4,58) o la relativa a la ley de garantías (4,40).
Según el barómetro, el médico sigue siendo el primer y principal referente a la hora de tomar decisiones sobre los problemas de salud para cada persona o de su familia.
NUEVAS INICIATIVAS
Ante estos datos, la Consejería va a llevar a cabo este año un mayor esfuerzo en el ámbito de la información como de la formación de los profesionales del SESCAM en la comunicación con los pacientes.
Ya se han adoptado algunas medidas relevantes como la puesta en marcha de unidades de información en urgencias o la constitución de las nuevas oficinas de calidad asistencial y atención al usuario en todos los hospitales y gerencias de Atención Primaria.
El consejero adelantó que su departamento incrementará a partir de este año la información institucional sobre aspectos relacionados con la salud o el consumo, o la relativa a la Ley de Garantías y otorgará una mayor cobertura legislativa a este área con la elaboración de un proyecto de ley de derechos y deberes de las personas en materia de salud que queremos elevar este año a las Cortes regionales para su aprobación.
