TOLEDO, 25 Oct. (EUROPA PRESS) -
La superficie forestal quemada en Castilla-La Mancha hasta el 30 de septiembre ascendió a 11.737,57 hectáreas, de la que 1.217,84 corresponden a vegetación herbácea y 10.519,73 a vegetación leñosa (7.321,49 de arbolado y 3.198,24 de no arbolado).
Así lo ha puesto de manifiesto la consejera de Agricultura, María Luisa Soriano, durante su comparecencia en las Cortes para informar sobre la campaña contra incendios forestales del año 2012, cuya temporada de alto riesgo concluyó el pasado 1 de octubre.
Soriano ha explicado que esta campaña ha estado marcada por las "condiciones climatológicas más desfavorables de los últimos años", por la sequía extrema y un descenso del 35 por ciento en las precipitaciones.
Además, ha destacado que la Junta ha hecho un "gran esfuerzo económico" para contar con un dispositivo en el que han participado en la época de peligro alto --julio, agosto y septiembre-- hasta 2.500 personas distribuidas en 6 centros operativos, entre ellos uno regional, 50 brigadas terrestres, 54 autobombas, 5 nodrizas, 38 autobombas-retén, 79 patrullas, 14 brigadas helitransportadas, 17 máquinas pesadas, 132 puestos de vigilancia, 16 helicópteros de extinción (uno de ellos pesado), 6 aviones de carga en tierra y 2 aviones de coordinación.
A todos estos medios hay que unir los que el Ministerio de Agricultura y otras comunidades han aportado en momentos puntuales, al igual que ha hecho la Junta en ocasiones para ayudar a otras regiones.
'CONATOS'
La consejera de Agricultura ha explicado que hasta el 30 de septiembre se han producido 1.098 incendios forestales, de los que 788 (el 71,8 por ciento) se han quedado en 'conatos', es decir, que se han controlado y extinguido antes de haber quemado una sola hectárea.
Esto evidencia, según Soriano, "la capacidad de respuesta inmediata de los servicios de extinción de incendios, que han posibilitado que prácticamente tres de cada cuatro siniestros se hayan quedado en simples conatos, lo que nos sitúa ocho puntos por encima de la media nacional y 4,2 puntos por encima de la media de Castilla-La Mancha de los últimos diez años".
En este sentido, Soriano ha resaltado "la gran profesionalidad y el excelente trabajo de las personas que trabajan en los servicios de extinción de incendios de Castilla-La Mancha", al tiempo que ha agradecido la ayuda y la labor del personal del Ministerio, la Guardia Civil, Protección Civil, las comunidades autónomas limítrofes, la Unidad Militar de Emergencias, ayuntamientos, diputaciones provinciales, el SESCAM, la Cruz Roja y todos aquellos ciudadanos que han colaborado durante la campaña.
CAUSAS DE LOS INCENDIOS
Por lo que respecta a las causas de los incendios, Soriano ha detallado que, según los informes de las Brigadas de Investigación de Incendios Forestales (BIIF) --formadas por personal del Cuerpo de Agentes Medioambientales de la Consejería de Agricultura--, 473 se han debido a negligencias y causas accidentales (43,2 por ciento), 369 han sido intencionados, (33,7 por ciento), 89 los han causado los rayos (8,1 por ciento), 25 han sido reproducciones (2,3 por ciento), y 140 por causa desconocida (12,8 por ciento).
Ante el alto porcentaje de incendios provocados y las negligencias, la Junta de Comunidades ha reclamado al Gobierno nacional que se incrementen las penas a los pirómanos, petición que el Ministerio de Justicia ha acogido favorablemente, anunciando en este sentido que endurecerá el Código Penal para castigar de forma más severa este tipo de delitos.
