CCOO dice que la negociación colectiva "puede tornarse muy conflictiva" por la actitud "irresponsable" de las patronales

TOLEDO 4 Mar. (EUROPA PRESS) -

El secretario regional de Acción Sindical de CCOO, Jesús Camacho, advirtió hoy de que la negociación colectiva 2009 "se puede tornar muy conflictiva" por la actitud "irresponsable e inaceptable" de las patronales, tanto de la cúpula de la CEOE como de las organizaciones patronales de muchas provincias y sectores.

Camacho presentó hoy el documento de "Criterios y Objetivos de CCOO para la Negociación Colectiva (NC) 2009 en Castilla-La Mancha" que la Ejecutiva regional del sindicato aprobó el pasado jueves y que pone el acento en los salarios, el empleo, la igualdad y la salud y seguridad de los trabajadores.

CCOO va a poner en común con UGT sus planteamientos para la negociación colectiva en Castilla-La Mancha, "para llevar juntos a las mesas de negociación idénticas reivindicaciones y demandas", informó el sindicato en un comunicado.

A diferencia de años anteriores, Camacho indicó que en esta ocasión los sindicatos afrontan la negociación colectiva "en ausencia de un Acuerdo Interconfederal para la Negociación Colectiva (AINC) entre CEOE-CEPYME, CCOO y UGT que fije la política general de patronales y sindicatos ante la negociación colectiva y el gobierno de las relaciones laborales".

Recalcó que el AINC es este año "más necesario que nunca", pero es justamente este año cuando la cúpula patronal "ha tomado la decisión política de no renovarlo; parece que pretendan provocar un clima de confrontación y tensión en la calle para dañar a quien gobierna y extraer así ventaja para sus posiciones en la las mesas del diálogo social".

Esta "ausencia de un Acuerdo estatal" ya ha tensionado la primera parte de la negociación colectiva en la región: la revisión de las tablas salariales de aquellos convenios con vigencia en este año. En muchos casos, las patronales provinciales se han negado a cumplir lo pactado, aunque la determinación sindical ha forzado ya la firma del 70% de estas revisiones. Sin embargo, aún queda ese otro 30%; y quedan por abrir buena parte de las mesas de los 26 convenios que hay que negociar este año (en Albacete y Guadalajara no se ha constituido aún ni una sola Mesa).

Camacho apeló a la "responsabilidad patronal" para desbloquear el AINC. "En la crudos momentos que vivimos, es imprescindible despejar incertidumbres y no generar más convulsiones, no provocar enfrentamientos en las mesas de negociación de los convenios colectivos. Romper los marcos de acuerdos nos aboca a desencuentros muy serios. La situación se puede tornar muy conflictiva y será responsabilidad de las cúpulas patronales".

ACTITUD "INACEPTABLE"

El dirigente de CCOO explicó que es "inaceptable" que la Patronal pretenda aprovecharse de una situación "de crisis financiera internacional y de crisis económica generalizada que no han provocado los salarios ni los trabajadores. No hay razón, no hay argumento para que, encima, las patronales pretendan meter mano en las carteras de los trabajadores. Hay que ser muy cicatero y tener una visión muy alicorta para pensar que conteniendo los salarios vamos a salvar la crisis".

Camacho indicó que en este escenario "los salarios van a jugar un papel muy importante", dada la "injustificada posición patronal" que pretende congelarlos, cuando no recortarlos. "Si mantienen su obsesión por situar el salario como pieza que se quieren cobrar en tiempos de crisis; van a provocar una seria conflictividad".

A respecto, explicó que en Castilla-La Mancha hay que negociar este año 24 convenios sectoriales de ámbito provincial y otros dos de ámbito regional, que afectan aproximadamente al 23% de la población asalariada sujeta a convenio y recalcó que "no se puede castigar a ese 23%, a esas 80.000 personas, respecto al 77% que ya tienen regulados sus salarios para 2009".

Además, recordó que el Estatuto de los Trabajadores permite acogerse a cláusulas de descuelgue y no aplicar el convenio de su sector a aquellas empresas que realmente tengan dificultades para asumir los salarios, y puedan demostrar esas dificultades.

Por último, indicó que "sería una torpeza contener las posibilidades de consumo de los trabajadores; deprimir el consumo deprimiría aún más la actividad económica al forzar una mayor reducción de la producción de las empresas".