COAG-IR de Castilla-La Mancha respalda e impulsa la propuesta de UGT de alcanzar un pacto regional por la inmigración

Actualizado: viernes, 17 agosto 2007 14:59

TOLEDO, 17 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Coordinadora de Agricultores y Ganaderos-Iniciativa Rural (COAG-IR) de Castilla-La Mancha consideró hoy necesario promover un pacto regional por la inmigración, tal como ha propuesto UGT, entendiendo que ese acuerdo social no es compatible con la moratoria de dos años que se fijó para los trabajadores por cuenta ajena procedentes de Rumanía y Bulgaria.

Según informó hoy COAG-IR de Castilla-La Mancha en nota de prensa, la propuesta lanzada por UGT resulta acertada para promover un pacto regional por la inmigración, ya que "los empresarios castellano-manchegos necesitamos de ellos y ellos de nosotros", señaló el secretario regional de COAG-IR, Apolonio Moreno, que afirma que "debemos apostar por la utilidad y la inteligencia y no por la avaricia".

COAG-IR mantendrá todos los encuentros que sean necesarios con este sindicato y con los demás representantes sociales de la Administración local y regional para alcanzar un acuerdo favorable del que salgan beneficiados todas las partes, principalmente los más discriminados socialmente ya que, según Moreno, "no seremos nosotros, como hemos demostrado en otras ocasiones, quienes demos el último paso".

En este sentido, la Coordinadora reitera la posición que ha venido expresando en contra de la moratoria de dos años para los trabajadores rumanos y búlgaros por cuenta ajena.

Moreno entiende que desde COAG-IR no se puede defender ni aceptar la existencia de "ciudadanos de dos velocidades en la Unión Europea como se nos está imponiendo, en base a una legalidad vigente y amparada por determinadas asociaciones que se caracterizan por la defensa social y de clases".

Desde COAG-IR en Castilla-La Mancha no se puede entender que ciudadanos búlgaros y rumanos en régimen de autónomos tengan desde el 1 de enero de 2007 los mismos derechos que cualquier otro autónomo castellano-manchego o de cualquier Estado miembro, mientras que a los trabajadores por cuenta ajena se les exigen dos años más para adquirir los mismos derechos.