TOLEDO, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
Cuatro deportistas paralímpicos y uno olímpico de Castilla-La Mancha han conseguido esta semana el reto de la Fundación de Cultura y Deporte de alcanzar la cumbre del Naranjo de Bulnes y por tanto, han cumplido también con su intención de coronar el Picu Urriellu y ondear la bandera de la región, no sin dificultades por el tiempo que les obligó a adelantar la subida en el caso de los tres primeros en conseguirlo, y de retrasarla en el resto.
Como indicó a Europa Press el atleta olímpico de Socuéllamos (Ciudad Real), Roberto Parra --uno de los que ayer viernes consiguió llegar a la cumbre junto al alcarreño Juan Pedro Ayllón, discapacitado intelectual y paralímpico--, se trata de un reto "superado con creces" y una experiencia "inolvidable".
Es un hito "más importante de lo que se puede pensar", reconoció Roberto Parra, quien explicó que incluso montañeros expertos que han encontrado en el camino les han hecho partícipes de la dificultad de este logro.
Parra, que fue campeón de Europa de 800 metros y tres veces olímpico, explicó que en la jornada del jueves tanto él como Ayllón no pudieron continuar con su escalada al Naranjo de Bulnes por el tiempo, y que el mismo viernes tuvieron mal tiempo al inicio de la escalada, aunque finalmente, las condiciones mejoraron y alcanzaron la cumbre en torno a las 15.00 horas.
Así, reconoció que está "deseando" que la Fundación Cultura y Deporte plantee otro reto de estas características y que incluso sea algo que se "perpetúe" y se haga ver la importancia de la escala, un deporte minoritario.
Por su parte, el coordinador de Actividades Deportivas de la Fundación Cultura y Deporte de Castilla-La Mancha, José Carlos Vega, destacó a Europa Press por su parte que se trata de una modalidad que no conoce ninguno de los participantes, que han estado preparándose "juntos" en León, Gredos o los Pirineos.
No obstante, según explicó Vega, el primero en alcanzar la cumbre, a 2.518 metros de altitud, fue Ángel Sánchez, discapacitado intelectual natural de Tarancón (Cuenca) y deportista paralímpico, que ante unas condiciones meteorológicas adversas "con agua, viento y nieve", explicó Vega, logró el reto en la madrugada del pasado miércoles.
Más tarde lo hicieron otros dos paralímpicos, el toledano Luis Bullido, discapacitado visual, y el conquense Luis Ángel Rubio, afectado de daño cerebral, que atacaron la cumbre a las siete de la mañana del miércoles a pesar de las adversas condiciones meteorológicas reinantes en la zona.
Con este logro deportivo, Castilla-La Mancha se vuelve a situar en vanguardia del deporte escribiendo "una de las páginas más brillantes del alpinismo español y mundial", ya que, nunca antes, una cordada formada por deportistas con diferentes discapacidades había logrado alcanzar la cima del Picu Urriellu.
