El Gobierno regional, satisfecho por las sanciones que Bruselas ha interpuesto al calzado procedente de Asia

Europa Press Castilla-La Mancha
Actualizado: miércoles, 4 octubre 2006 20:28

TOLEDO, 4 Oct. (EUROPA PRESS)

El consejero de Industria y Tecnología, José Manuel Díaz-Salazar, expresó hoy su satisfacción por que Bruselas haya atendido las peticiones del sector del calzado castellano-manchego, y haya decidido establecer aranceles a la producción procedente de China y Vietnam, y confió en que este expediente sirva de precedente para otros, "que no se acaban de resolver".

A preguntas de los medios, tras rubricar un convenio de colaboración con la UCAMAN, el titular regional de Industria se defendió que esta decisión es consecuencia de las movilizaciones que el Gobierno castellano-manchego ha protagonizado junto al sector del calzado, tanto a nivel regional como nacional.

No obstante, exigió a Bruselas que continúe investigando, ya que estos dos países, junto a otros, estaban incurriendo en 'dumpping', vendiendo por debajo del coste, vulnerando las reglas del juego y perjudicando a una industria estrategia para Castilla-La Mancha como es la del calzado.

Recordó el consejero que Bruselas incohó el expediente, a pesar de las reticencias del Comisario y de los países nórdicos, donde pesa más la importación que la manufactura, y ahora se resuelve, estableciéndose aranceles, durante dos años, de 16,5% para el calzado chino, y de un 10% para el vietnamita.

"Desde el Gobierno de Castilla-La Mancha --subrayó--, a pesar de respetar las reglas de la mundialización, exigimos que no se alteren las reglas del juego y que se persiga la competencia desleal, porque los problemas por los que atraviesa el sector en la región no son por falta de calidad o de competitividad del producto, sino por la competencia desleal procedente de países asiáticos".

Por ello aseguró que "hemos de mantener la tensión y el clima de unidad, entre Gobierno y sector, para corregir otras prácticas que alteran las reglas del juego, porque en ningún caso la mundialización se confunde con la deslealtad comercial en los mercados internacionales".

Contenido patrocinado