TOLEDO, 29 Mar. (EUROPA PRESS)
El vicepresidente segundo y portavoz de la Junta, Emiliano García-Page, que insistió en la solidaridad del Gobierno con el agua para beber, confió hoy en la "prudencia" del Gobierno central ante el trasvase al Levante que decidirá el viernes el Consejo de Ministros, puesto que el Ministerio de Medio Ambiente está diciendo que la situación de la cabecera del Tajo es tan delicada como para pensar "en tener en la cabeza" los trasvases para regadío.
A preguntas de los medios en la rueda de prensa para dar cuenta de los acuerdos del Consejo de Gobierno, dijo que hoy mismo, en la reunión de la Comisión de Explotación del trasvase Tajo-Segura, el Gobierno de Castilla-La Mancha seguirá defendiendo en todo caso su solidaridad con el "agua para beber".
Así, sobre la petición de 170 hectómetros cúbicos de los regantes murcianos, dijo que están en "una escala insaciable" y "no se puede estar así toda la vida". Sería bueno que en Murcia "políticos o no", aprovecharán la situación de "cierta" emergencia para reflexionar sobre el futuro, porque su crecimiento "no puede depender del trasvase Tajo-Segura" y, en este sentido, hay que aprovechar el tiempo para exigir acelerar los proyectos de desaladoras y evitar que sea un problema "permanente".
El vicepresidente segundo, que afirmó que la política de mover los ríos de sitio "está tocando a su fin" porque cada día "tiene menos sentido", explicó que en los últimos quince días, el Tajo ha bajado los límites ecológicos mínimos, y en cinco ocasiones, ha dejado de ser "legalmente un río", porque llevaba menos de seis metros cúbicos por segundo a su paso por Aranjuez (Madrid) como exige la ley.
García-Page manifestó que los embalses han mejorado "algo más" en la cuenca del Segura que en la del Tajo, "al menos en la cabecera", insistiendo en que la posición del Gobierno regional al respecto es "mucho más clara y nítida que las aguas del Tajo cuando pasan por Toledo".
Por ello, y ante el trasvase, reclamó prudencia al Gobierno de España y mostró su confianza "en su coherencia y en su prudencia", insistiendo en que en el caso del abastecimiento para consumo humano, la Junta exigirá "un control exhaustivo del uso real que tiene el agua" y que "el trasvase Tajo-Segura, y aún siendo solidarios porque nunca negaremos el agua para beber, debe ser siempre el último recurso".
El Tajo-Segura, en todo caso, recalcó, debe ser "la salida última", no el recurso "cómodo y fácil", ya que teniendo un agua en el Levante no pueden seguir desarrollando un modelo de crecimiento económico y social con un agua que les llega desde 300 kilómetros en esa estrategia "de mover los ríos de sitio que no tiene encaje natural".
AGUA BARATA
La política de agua del Ministerio de Medio Ambiente "está poniendo más que de manifiesto que es posible utilizar el agua del mar" y resaltó que en realidad hay mucha gente del Levante español que no está planteando un trasvase de agua, sino que el problema es "de agua barata", y pretenden que el agua de regadío "la paguemos todos".
Por ello, en el corto plazo de unos años "no va a ser un problema de cantidad de agua", sino que se quiere "tirada de precio", y, a su juicio, "algunos están en ese planteamiento de todo el agua que puedan ahora, aunque nos muramos de sed dentro de unos días", recalcando que "es más fácil trasladar un huerto" que mover de sitio los ríos.
VENTA DE AGUA
García-Page, que solicitó al PP de Castilla-La Mancha que hagan lo que sus compañeros de Aragón, "que en los últimos días le están diciendo al PP en el Levante que dejen ya de insistir en los trasvases", pidió además, sobre el ofrecimiento del Ayuntamiento de Zorita de los Canes (Guadalajara), de vender su concesión de agua del Tajo a regantes del Segura, que "tomen cartas" en el asunto o que "al menos dejen ver su posición".
El vicepresidente segundo indicó en este sentido que "la solución no es la compra-venta de agua, que es un bien de todos", poniendo de manifiesto que si se puede comprar y vender agua del Tajo es porque existe una infraestructura, una tubería, hecha para ello, lo que a su juicio es "injusto".
El viceconsejero, preguntado además sobre la situación de las Tablas de Daimiel, dijo que no se aprecia "modificación de la situación" según lo que ha establecido el Ministerio de Medio Ambiente, manifestó.
Asimismo, y acerca del sistema de Picadas tras decidir el Consejo de Gobierno ayer encomendar la financiación y gestión de la explotación de la infraestructura de ampliación del sistema de Picadas para incorporar recursos del río Tajo a dicho sistema, García-Page confirmó que de este modo el abastecimiento estará garantizado "muchos años" en esta zona de crecimiento demográfico muy importante.