TOLEDO 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) de Castilla-La Mancha prevé una importante reducción de la cosecha de uva debido a la "grave sequía" que sufre la región desde hace meses, algo que esta organización ya advirtió en el mes de mayo.
De este modo, UPA augura el adelanto de la campaña de vendimia, "ya que muchos cultivos están empezando a notar el estrés hídrico como consecuencia de la falta de agua y las altas temperaturas", según ha informado este colectivo en nota de prensa.
Ante esta situación y si durante las próximas semanas no llueve, "parece claro que, por un lado habrá un adelanto de la campaña de vendimia, y por otro, habrá una disminución importante en la producción no solo regional sino también nacional".
"Si tomamos los datos de la campaña 2010/2011, la producción a nivel nacional fue de 39,86 millones de hectolitros, de los que Castilla-La Mancha produjo el 50 por ciento. Las parcelas de regadío, que en la región suponen un 40 por ciento de la superficie vitícola, son las que parecen llevar mejor esta climatología tan adversa aunque el desarrollo de estas parcelas también se está viendo condicionado por esta situación", ha señalado UPA en nota de prensa.
En cuanto al precio, UPA considera que se dan las condiciones para que sea alto debido a que no hay existencias de la campaña anterior, por lo que en esta campaña se deberá exportar un porcentaje alto de la producción y "todo esto con el porcentaje importante de bajada de producción que se prevé".
CAMPAÑA "NORMAL" PARA PRODUCTORES
En contrapartida, la bajada de la producción que prevé UPA, unido a un aumento considerable los costes de producción, hará que sea una campaña "normal" para los productores en términos de rentabilidad.
A esta bajada de producción que habría por sequía se le sumarían el descenso que se producirá por las tormentas de granizo dadas hasta la fecha en algunas zonas vitícolas, y el porcentaje importante de viñedo que se han reestructurado este año.
A este respecto, UPA considera importante el porcentaje de dinero que vendrá a través de las ayudas de reestructuración, ya que Castilla-La Mancha recibirá un total de 8,3 millones de euros de los 11,3 millones que había, después del reparto en la última conferencia sectorial del Ministerio, "lo que supone una cantidad importante de dinero para seguir pagando los proyectos de reestructuración que todavía no han entrado en pago".