El vicepresidente de la CEE cree que en estos momentos está en juego la unidad de España y la de sus raíces

Actualizado: lunes, 23 enero 2006 15:59

TOLEDO, 23 Ene. (EUROPA PRESS)

El arzobispo de Toledo y vicepresidente de la Conferencia Episcopal Española, monseñor Antonio Cañizares, expresó hoy su preocupación "por la gravedad de estos momentos en los que muchas cosas están en juego", entre ellas "la unidad de España y de sus raíces culturales e históricas".

En la homilía que pronunció hoy en la Catedral de Toledo, con motivo de la festividad de San Ildefonso, monseñor Cañizares aseguró que está está en juego la "herencia de valores humanos y cristianos que representan el patrimonio más precioso del pueblo español, la herencia de la cultura y la herencia de la unidad".

Incluso, continuó, "más allá de específica configuración política consolidada, sobre todo en el final del siglo XV y el XVI, y que ha estado y sigue arraigada en la conciencia de los españoles, que se han sentido y sienten miembros de una única nación, en la diversidad de los pueblos que la integran".

El arzobispo de Toledo justificó estas palabras considerando que "nada de lo que sucede en España, en la sociedad, le es ajeno a la Iglesia". "Nada humano nos es extraño. Nada de lo que afecta al hombre, a la sociedad, a nuestra historia y a nuestro país le es ajeno a los cristianos".

Además, indicó que la solicitud por España "no puede manifestarse sólo mediante palabras" y "es necesario que todos los creyentes se movilicen mediante la oración común" y por ello invitó a toda la Diócesis, coincidiendo con el tiempo de Cuaresma, a "orar intensamente por España".

"Oremos, pues, para que Dios, por intercesión de la Santísima Virgen Maria, y de todos los santos españoles, singularmente de San Ildefonso, conceda a España mantener viva la unidad solidaria de todas sus gentes, que conserve la herencia recibida de la fe y de la cultura arraigada en las raíces cristianas, que el Señor nos haga a los católicos españoles recuperar el vigor de una fe vivida, ser testigos del Evangelio, hombres de fe, fieles a las raíces católicas de nuestra historia común", señaló.