VALLADOLID 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Colegio de Arquitectos de Valladolid (COAVA) celebra hoy, lunes 7 de octubre, el Día Mundial de la Arquitectura con la colocación de una placa DOCOMOMO en el colegio Juan XXIII, elegido por los colegiados vallisoletanos por su especial valor patrimonial.
La celebración continuará esta tarde con la inauguración de la exposición 'Reciclajes domésticos' en el Museo Patio Herreriano, abierta al público hasta el 9 de diciembre y con el acto de reconocimiento a los arquitectos del COAVA que cumplen 25 y 50 años en la profesión.
El presidente del COAVA, Manuel Vecino, y el concejal de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Valladolid, José Ignacio Zarandona, han sido los encargados de descubrir esta mañana la placa DOCOMOMO.
En el acto han estado presentes también Julián Aguado Fernández, quien ha intervenido durante el acto, y la familia de Luis Aníbarro Blanco, ambos autores del edificio condecorado.
Esta obra fue seleccionada por los arquitectos de Valladolid frente a las viviendas y oficinas de Caja España en la Plaza España (Leopoldo Uría, Miguel Costa y Joaquín Hernández) y la Real Sociedad Hípica, actual complejo deportivo Juan de Austria (Luis Gutiérrez Soto).
A la cita han asistido también el subdirector de internacionalización y relaciones institucionales de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Valladolid, José Ramón Sola; el arquitecto representante de la UVA en el DOCOMOMO Ibérico, Daniel Villalobos; la arquitecta representante del COACYLE para la Comisión Técnica del DOCOMOMO Ibérico, Sara Pérez Barreiro; y representantes de las empresas patrocinadoras del Día Mundial de la Arquitectura (ARQUIA, EFAPEL, AEICE, COSENTINO y ETSAVa).
Por la tarde, el Patio Herreriano acogerá además un acto de reconocimiento a los colegiados del COAVA que cumplen 25 y 50 años en la profesión.
La Fundación DOCOMOMO Ibérico otorga esta distinción por los valores patrimoniales del colegio Juan XXIII, ubicado en los límites de la ciudad, en el Camino del Cementerio, y diseñado para la Compañía de las Discípulas de Jesús.
El programa se distribuye siguiendo una traza orgánica en torno a un espacio central con un pequeño patio del que parten dos alas. En el proyecto original, la de la izquierda se destinaba a la residencia y la de la derecha a aulas. Enfrente se ubica un volumen que contiene los usos de salón de actos y capilla. Estos elementos son los más representativos de del complejo educativo.
La capilla se organiza en tres bandas longitudinales, de las que la central resulta la de mayor altura. Se remarca la longitudinalidad con una serie de vidrieras. El paño de entrada se combina en ladrillo, hormigón y placas cerámicas, mientras que el resto del conjunto se materializa solo en ladrillo, actuando de fondo neutro.
La Fundación DOCOMOMO se fundó en París en 1990, y se organizó en 1994 con sede en Barcelona como DOCOMOMO Ibérico, integrando el estudio de la arquitectura de España y Portugal de ese período.
El COAVA arrancó con la primera colocación de una placa DOCOMOMO en Valladolid en el año 2012 en el Colegio Apostólico de los Padres Dominicos (1952-1957) de Miguel Fisac; al año siguiente, en 2013, colocaron otra placa en el Mercado Central de Abastos de Valladolid (1965-1966) de Juan A. Aguiló Villahermosa y Ángel Valdés Martínez (actualmente Centro Integrado de Equipamientos), sito en la calle Cigüeña y Tórtola; en 2014, en el Matadero Municipal de Valladolid (1931-1936), de Alberto Colomina y Botí, ingeniero; en 2015, en las Escuelas Graduadas (Colegio Público San Fernando) (1932-1950), de Joaquín Muro Antón; en 2016 en el Colegio San Agustín (1959-1961), de Cecilio Sánchez-Robles; en 2017, en el Colegio Internado Sagrada Familia (1963-1967), de Antonio Vallejo Álvarez, Antonio Vallejo Acevedo y Fernando Ramírez de Dampierre; en 2018, en el Hogar Nacional-Sindicalista del barrio de Las Delicias (1937), de Jesús Carrasco Muñoz; en 2019, en el Cinema Roxy, de Ramón Pérez Lozana (1932); en 2020, en la fábrica de tableros de fibras TAFISA, del equipo de arquitectos Antonio Vallejo y Santiago de la Fuente; en 2021, en las oficinas de la refinería de aceites Hipesa, más conocidas como la Casa del Barco, de Constantino Candeira (1935); en 2022, en el Colegio Mayor Santo Tomás, de Fray Coello de Portugal (1963); y el año pasado, en 2023, en la Casa Cuna, de Ángel Ríos Gómez e Isaías de Paredes Sanz (1968). Además, el Colegio de Cristo Rey también cuenta con otra placa DOCOMOMO que instaló el propio colegio en 2015.