La Comunidad contaba con 29 pulseras para maltratadores activadas a 30 de septiembre

Actualizado: domingo, 16 octubre 2011 13:45

De los 3.000 dispositivos que puso en marcha el Gobierno central en 2009 solo están activos en el país 746

SEVILLA/VALLADOLID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -

Castilla y León contaba con 29 pulseras para maltratadores activadas a fecha de 30 de septiembre de 2011, según los últimos datos publicados por el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad y recogidos por Europa Press.

A dicha fecha, la Comunidad Autónoma que más pulseras tenía activadas era Madrid, con 279. Le sigue Andalucía, con 138, Comunidad Valenciana (69), Cataluña (31), Castilla-La Mancha y Castilla y León (29, respectivamente), Canarias (26), Cantabria (25), País Vasco (23), Baleares (20), Galicia (19), Aragón (17), Asturias (17), Murcia (12), Extremadura (9) y La Rioja (4). Navarra era la única región en la que, hasta el mencionado día, no había activada ninguna pulsera.

Los dispositivos para el control telemático de alejamiento de los maltratadores o pulseras para los agresores por violencia de género --que suelen llevar en el tobillo porque en la muñeca, pese a tener un aspecto similar a un reloj de pulsera, es más visible-- sirven para tener localizado durante las 24 horas al día al agresor mediante un sistema GPS.

Así, en el caso en que éste rompa la orden de alejamiento y se acerque más de lo permitido a la víctima, a ésta le salta inmediatamente una señal acústica en otro dispositivo (similar a un móvil) que debe llevar siempre consigo y que le permitirá "tener tiempo para refugiarse, buscar ayuda o incluso llamar a la policía". Del mismo modo, esta señal de alerta llega a los agentes de la autoridad para que procedan a la búsqueda y detención del individuo.

Son, por tanto, uno de los métodos "más efectivos" a la hora de evitar asesinatos por violencia de género porque, según recuerda la directora general para la Violencia de Género de la Junta de Andalucía, Ana Soledad Ruiz, "refuerza la seguridad de la víctima y ayuda al trabajo policial". Pese a ello, su uso es minoritario y, por tanto, está "infrautilizado".