El centro Forgeria contó con el asesoramiento de Sodeva y una inversión de 300.000 euros
VALLADOLID, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las profesoras Elena Señor y Elena Olmedo, que se encontraban en situación de desempleo, han puesto en marcha en una panera rehabilitada de la localidad vallisoletana de Geria un Centro Multidisciplinar Adaptado (CMA) con aulas y alojamiento en el que se podrán acoger todo tipo de proyectos de trabajo en colaboración con otros profesionales, emprendedores y Pyme de distintos sectores, pero orientado sobre todo a la enseñanza de idiomas.
El centro, que ha sido inaugurado este martes, ha requerido una inversión de 300.000 euros por parte de estas dos autónomas, ambas procedentes de Geria y dedicadas durante años al mundo de la docencia y ha seguido un minucioso proyecto de accesibilidad universal para personas con discapacidad tanto físicos como visuales, en cumplimiento de todos los criterios legales.
Forgeria, que es el nombre de la empresa creada por Elena Señor y Elena Olmedo, tiene la peculiaridad de que se encuentra adosado a la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, ya que, de hecho, formaba parte de una vivienda, propiedad del convento de San Benito de Valladolid, aneja al templo hasta que en los años 20 del pasado Siglo fue adquirido por el abuelo de una de las titulares del proyecto.
La panera tuvo diversos usos a lo largo del tiempo desde que en sus orígenes era utilizada como pósito para los diezmos de cereal que recibía la Iglesia para posteriormente adaptarse como vivienda para acoger a sacerdotes de la orden e incluso, ya en el Siglo XX, a vendedores ambulantes que pasaban temporadas en la localidad. Tras pasar a propiedad particular, la construcción original se derrumbó y fue levantada la panera con la estructura actual.
La obra ha conservado toda la fachada exterior del edificio y se ha centrado en el tratamiento interior para que sea completamente accesible a personas discapacitadas, por lo que ha sido diseñado por una arquitecto formada en la escuela escandinava, y cuenta con todos los elementos necesarios como ascensor, detectores de presencia para la iluminación, rampas de acceso, señalizaciones de embarques en las escaleras y elementos visuales para identificar las puertas de cristal.
De hecho, como ha explicado Elena Señor, que es afiliada a la ONCE ya que tiene baja visión, uno de los objetivos del proyecto es el trabajo por la supresión de barreras físicas y mentales "entre personas con diversidad funcional y las que no tienen discapacidad".
En el acto inaugural han participado también la diputada provincial Laura Fernández Peña, el alcalde de Geria, Esaú Fernández, el alcalde de Tordesillas y representante del Grupo de Acción Local Zona Centro, José Antonio González Poncela, y la jefa del Departamento de Servicios Sociales de la ONCE, Arancha Casado.
SERVICIOS PARA DISCAPACITADOS EN EL MEDIO RURAL
El regidor de Geria ha mostrado su satisfacción por la apertura en el pueblo de un proyecto empresarial como éste y por la rehabilitación de un edificio histórico de la localidad, mientras que la diputada provincial ha recalcado que las iniciativas orientadas para personas con discapacidad "también pueden ser un ámbito por desarrollar" en el medio rural, más allá del turismo y la gastronomía.
Junto a ello, la orientación empresarial de la idea se basa en el concepto del cotrabajo --coworking-- para compartir el espacio con otros profesionales, emprendedores y pymes de diferentes sectores. "Se trata de compartir un espacio, tanto físico como virtual, para desarrollar proyectos de forma independiente, que a la vez fomentan proyectos comunes", ha añadido Elena Señor.
De este modo, el CMA de Forgeria acogerá acciones formativas dirigidas a la inmersión lingüística, tanto en la enseñanza de español para extranjeros como inglés, alemán y otros idiomas para españoles. También prevén colaborar con iniciativas psicopedagógicas, para el desarrollo de las inteligencias múltiples y de la inteligencia emocional, a través de actividades de ocio educativo y cultural.
El centro cuenta con un espacio de cerca de 200 metros cuadrados dividido en dos aulas para la impartición de clases y un 'office' además de un solárium y siete habitaciones que pueden alojar a diez personas para poder acoger cursos de grupos reducidos durante más de un día sin que sea necesario moverse del lugar. Asimismo, está equipado con un baño completo y un aseo adaptados, así como otros cuatro aseos.
Todas las habitaciones están adaptadas para personas con discapacidad y equipadas con interfonos para agilizar las comunicaciones en caso de que los usuarios requieran atención o ayuda.
También se ha habilitado patio interior, compartido con la propiedad privada de la vivienda que formaba parte del complejo eclesial, que se puede utilizar para actividades lúdicas y formativas o para acoger comidas y cenas, para lo cual Forgeria contará con los servicios de empresas externas de catering.
