Herrera traslada a la ministra "la controversia radical" de la Junta y recuerda al Gobierno que reconsiderar el cierre sería "un acierto"
VALLADOLID, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), Rosa Aguilar, ha aseverado este miércoles que la decisión sobre el cierre de la central nuclear de Santa María de Garoña ya está tomada y ha precisado que la enmienda de CiU y PNV aprobada el martes en el Congreso de los Diputados, con los votos a favor de PP y PSOE, y que abre la puerta a que las centrales nucleares puedan seguir operando más allá de 40 años "no lleva ningún tipo de cambio de posición por parte del Gobierno".
Así lo ha defendido Aguilar en su comparecencia ante los medios de comunicación tras la reunión mantenida este miércoles en la capital vallisoletana con el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, y los consejeros de La Presidencia, José Antonio de Santiago-Juárez; de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, y de Medio Ambiente, María Jesús Ruiz.
"En relación a Garoña hay una decisión tomada, punto y final y no hay más comentarios que hacer o que realizar", ha sentenciado la titular del MARM, que ha apelado para ello a la decisión que adoptó en su día el Consejo de Ministros para clausurar la central nuclear de Garoña.
Asimismo, Rosa Aguilar ha aseverado que la enmienda a la Ley de Economía Sostenible que este martes se aprobó en el Congreso "tiene la virtud de permitir a cada cual mantener la posición que tenía con anterioridad a su aprobación" por lo que ha rechazado que conlleve un cambio de postura por parte del Ejecutivo central.
En este contexto, la ministra ha defendido que "se ha podido llegar al consenso" a pesar de que cada uno tiene su opinión. "En esta enmienda todos han estado cada uno con su posición", ha concluido la titular de la cartera de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, para quien se trata de una enmienda en la que todo el mundo ha confluido pero que permite también a las partes mantener la posición que tenía al respecto "antes, durante y después".
La ministra ha defendido al mismo tiempo que ha defendido la estrategia de 2020 por ser un instrumento útil hacia el futuro.
Por su parte, el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha expresado la "controversia radical" del Gobierno regional sobre esta decisión y se ha remitido a la carta que envió el pasado 24 de enero al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en la que le pedía que no se cerrase la central de Santa María de Garoña y se pudieran salvar los empleos existentes.
Para Juan Vicente Herrera, más allá de hablar de un "cambio de criterio" por parte del Gobierno tras la enmienda aprobada ayer con los votos a favor del Grupo Socialista en el Congreso "habría que abordar esta cuestión como una oportunidad" para que el Ejecutivo central "sea consciente de que volver atrás y reconsiderar la decisión --sobre el cierre de Garoña-- es un acierto".
El presidente de la Junta ha recordado que el cierre de Garoña tendrá consecuencias desde el punto de vista humano, puesto que está en juego el futuro de 1.000 familias de la zona, y económico, puesto que va a poner fin a una actividad "irremplazable".
Herrera ha ido más allá y ha asegurado que si el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero cambia de opinión sobre el cierre de Garoña la Junta sabría agradecer y reconocer lo que supondría "una sabia decisión".
