'La Revolución Delirante' fomenta la libertad de pacientes mentales

Miembros de 'La Revolución Delirante'
'LA REVOLUCIÓN DELIRANTE'
Actualizado: sábado, 3 octubre 2015 12:48

   Reivindica el concepto de locura frente al de enfermedad mental y aboga por darle un carácter "público y natural"

VALLADOLID, XX (EUROPA PRESS)

   El movimiento surgido en Valladolid 'La Revolución Delirante' fomenta la "lucha social" por la libertad de las personas diagnosticadas con enfermedad mental dentro de la comunidad y combatir el "estigma" que sufren, para lo que apuesta por la formación "rigurosa e independiente" de los profesionales.

   'La Revolución Delirante', reciente ganadora del Premio Intras 2015, reivindica desde 2011 el concepto de locura frente al de enfermedad mental y aboga por darle un carácter "público y natural".

   Aunque esta asociación posee una decena de miembros, sus actividades están abiertas al público y cuentan con la participación tanto de profesionales, como de pacientes y familiares, según ha señalado en declaraciones a Europa Press una de sus responsables, la doctora Laura Martín, quien ha confesado que el movimiento "no nació con vocación asociativa", sino que se cumplió con este trámite legal por cuestiones prácticas. "Buscamos a gente inquieta", ha afirmado.

   Asimismo, 'La Revolución Delirante' pretende implicar a profesionales "no sólo sanitarios", sino también de otras ramas para concienciar en la "formación independiente" y en la importancia de "individualizar" el tratamiento en lugar de "estandarizar o categorizar". "Es importante que haya contacto con las personas que sufren malestar psíquico y ver que no pasa nada", ha recalcado Martín, la cual ha criticado el modo de vida occidental "excluye a cualquiera que no encaje" y enseguida opta "por darle medicación".

   Por ello, abogan por el "trato" al paciente sobre el "tratamiento" y sugieren "desdibujar" parcialmente la jerarquía entre paciente y facultativo, aunque dentro de unos límites. Al hilo de esto, la doctora Martín ha reconocido que la relación de los pacientes con los profesionales supone un "campo de entrenamiento" para enfrentarse posteriormente a las relaciones con el resto de la sociedad.