BARCELONA 19 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Catalana de Municipios (ACM) creará una "comisión revisadora de cuentas" que utilizará para validar que sus gastos sean correctos, una decisión que llega después de la polémica por la gestión que hizo Josep Maria Matas, exnúmero dos de la Diputación de Barcelona, cuando trabajaba para la entidad municipalista.
Así lo ha anunciado el presidente de la ACM, Miquel Buch, en una entrevista a 'El Periódico' recogida por Europa Press, en la que precisa que esta comisión estará formada por personal de la casa y externo y "determinará si el gasto que se está realizando es adecuado".
Asimismo, la entidad municipalista aprobará un régimen de incompatibilidades para que "los directivos no puedan tomar según tipo de decisiones", como sucede en los ayuntamientos cuando un concejal no puede participar en determinadas votaciones.
Buch admite tener la sensación de que la conducta de Matas ha sido "éticamente reprobable", deja para la Fiscalía que determine si ha habido alguna ilegalidad, y asegura que recibió con absoluta sorpresa las actuaciones del ahora cesado exnúmero dos de la diputación.
El presidente de la ACM garantiza que, antes de que la Fiscalía entrara de oficio en el caso, la entidad revisó todos los contratos que firmó con la empresa de Matas y el trabajo que se facturaba estaba hecho.