L'AMB incorporar més de 100 busos de baixes i nulles emissions aquest trimestre - AMB - Archivo
BARCELONA 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Consejo Metropolitano del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ha aprobado definitivamente este martes el Plan metropolitano de Movilidad Urbana (PMMU) 2019-2024, ha informado en un comunicado.
Se trata del el instrumento de planificación y programación de políticas y líneas de actuación sobre la movilidad del entorno de Barcelona que el AMB prevé impulsar y ejecutar en los próximos cinco años, en colaboración con los ayuntamientos y las administraciones competentes.
El PMMU dibuja un modelo de movilidad basado en cuatro pilares (movilidad saludable, sostenible, eficiente y equitativa) que sigue los objetivos que se establecen en el Plan clima y energía 2030 del AMB, el Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
El vicepresidente de Movilidad del AMB, Antoni Poveda, ha asegurado que el PMMU permitirá desplegar una movilidad metropolitana "potente y verdaderamente sostenible", así como afrontar los retos presentes y futuros del transporte público y disponer de las infraestructuras necesarias.
El coste estimado de las actuaciones prevista en el PMMU, sin tener en cuenta el desarrollo de las infraestructuras, es de 1.354 millones, de los cuales el AMB asumirá el 27% (369,9 millones), y el resto lo asumirán el resto de administraciones en función de sus competencias.
La cuantía económica prevista para ejecutar parte de las infraestructuras es de 8.922 millones de euros, por lo que, globalmente, la ejecución de todas las medidas incluidas en el PMMU supondrían un coste aproximado de 10.276 millones de euros (389,2 millones asumidos por el AMB).
OBJETIVOS
Entre los objetivos del PMMU, destaca la reducción del 50% de la población expuesta al ruido y a la baja calidad del aire, tomando como referencia el NO2, y prevé incrementar en un 10% los desplazamientos a pie, en bici y en vehículos de movilidad personal en días laborables.
Plantea que la incorporación de vehículos eléctricos y de bajas emisiones lleguen al 5% del parque censado; una reducción del 5% de las emisiones de CO2 derivadas del transporte y la movilidad, así como la reducción de los desplazamientos en vehículos privado, entre otros.