BARCELONA 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
La digitalización total de la imagen de cada una de las 7,5 millones de pruebas radiológicas que se realizan anualmente en Catalunya, un proyecto iniciado en 2008 y que está previsto que finalice totalmente a finales de este año, permitirá a la Conselleria de Salud de la Generalitat ahorrar hasta 10 millones de euros.
En rueda de prensa, la consellera Marina Geli ha señalado que este proceso, que forma parte del proyecto de la Historia Clínica Compartida (HC3), se engloba en una "estrategia casi revolucionaria" de aplicación de las tecnologías de la información y la comunicación al sector salud.
El ahorro contabilizado se refiere a que el proyecto ha permitido dejar de utilizar las tradicionales placas en la realización de pruebas radiológicas, a lo que debería sumarse también algo más intangible como el ahorro del tiempo y las incomodidades del transporte de las pruebas.
Con ello y junto con el volcado de estas imágenes que se hace de forma gradual en el aplicativo de la HC3 --hasta la fecha ya están transferidas 1,2 millones de pruebas y la cifra sigue creciendo a un ritmo de 5.000 imágenes más cada día--, la Conselleria vaticina que se reducirán las pruebas que se realizan, porque se evitará la duplicidad, con la consiguiente optimización de recursos y reducción de listas de espera.
Geli ha augurado que entre las "tendencias esperadas" se encuentra la reducción de la radiología convencional, también con el objetivo de reducir la radiología a la que se exponen los ciudadanos, aunque el análisis de estos resultados y la digitalización de otro tipo de pruebas --como los electrocardiogramas y las endoscopias--, permitirá en un futuro la reordenación de la imagen médica en Catalunya.
Entre las ventajas tangibles y que no forman parte de un futuro hipotético, Geli ha señalado la posibilidad actual de que una persona se haga una prueba en un hospital aislado y la imagen sea consultada por un especialista ubicado a kilómetros de distancia, que haga un primer diagnóstico sobre la gravedad de la situación del enfermo, entre otras aspectos.
Así, además, las máquinas disponibles en Catalunya para realizar radiografías o resonancias magnéticas también podrán funcionar más horas y por tanto atender a más ciudadanos.
HISTORIA CLÍNICA COMPARTIDA
La aplicación de las TIC a la Salud es también visible en el hecho de que durante la semana pasada se realizó en Catalunya la receta electrónica 60 millones, o en que dentro de la Historia Clínica Compartida ya existen 20 millones de informes correspondientes a los 7,3 millones de catalanes que la conforman.
Cada día se bajan 2.000 documentos de este proyecto y lo utilizan más de 1.000 profesionales, ha recordado Geli, que ha señalado que se trata de una herramienta para unir toda la red asistencial.
En el marco de la continuación de estas líneas estratégicas, el consejero delegado de la Agencia de Información, Evaluación y Calidad en Salud, Joan Guanyabens, ha asegurado que a lo largo de 2011 se incorporarán los electrocardiogramas a esta estrategia y se completará el volcado de todas las pruebas radiológicas a la HC3.