Dos médicos del hospital de Tremp declaran por la muerte de una niña de 18 meses

Actualizado: domingo, 3 abril 2011 12:54

BARCELONA, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -

Dos médicos del Hospital Comarcal del Pallars, en Tremp (Lleida), declararán este lunes como querelladas por la muerte de una niña de 18 meses después de que, presuntamente, las doctoras confundieran una obstrucción intestinal con una diabetes, según han explicado a Europa Press fuentes judiciales

Los padres de la menor, una pareja de Barcelona que estaba de vacaciones en Lleida, se querellaron contra el hospital y la juez ha admitido a trámite la denuncia y ha citado este lunes a las dos médicos.

Según la querella, a la que tuvo acceso Europa Press, la noche del 26 de agosto de 2010, la pareja, que estaba de vacaciones en Lleida, llevó a su hija al hospital porque tenía fuertes dolores en el abdomen y había vomitado el biberón.

Tras las primeras exploraciones, les dijeron que la niña estaba muy deshidratada y tenía gastroenteritis y, tras la prueba de la glucemia, las doctoras llegaron a la conclusión de que la niña era diabética, "un diagnóstico evidentemente aventurado y temerario, sin unas mínimas pruebas complementarias que verificasen cuál era el motivo del elevado nivel de azúcar en la sangre".

Las doctoras no realizaron más pruebas a la niña, y propusieron a los padres su traslado al Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, que tiene una unidad especializada, que debía producirse la mañana siguiente con helicóptero.

De madrugada la niña vomitó sangre coagulada --que la médico aseguró que era papilla, aunque la niña no había comido nada sólido desde hacía varias horas-- y una nueva prueba reveló que no había acetona en su cuerpo, algo contradictorio con el diagnóstico de diabetes, que en ese momento "debería haber sido descartado".

En ningún momento se le realizó a la menor una prueba radiológica o una ecografía que, según la querella, podrían haber detectado que la niña tenía una obstrucción intestinal que podría haberse tratado.

Según la querella de los padres, representados por el letrado José Antonio Fontanilla, las médicos no tuvieron en cuenta la respiración acelerada de la niña, las altas pulsaciones, ni una nueva prueba de glucosa, que demostró que el nivel de azúcar era muy inferior al de unas horas antes y se limitaron a esperar el traslado, una conducta que, según la querella, "a todas luces infringía las más elementales normas de cuidado".

La pequeña falleció sobre las seis de la mañana y la autopsia demostró la obstrucción, que se hubiera podido detectar con una prueba.

La doctora que tomó directamente las decisiones y la médico responsable del servicio declararán la semana que viene ante los juzgados de Tremp, según han explicado a Europa Press fuentes judiciales.

QUEJAS POR NO CUBRIR LAS BAJAS

Según la querella, los padres han podido saber tras los hechos que la Generalitat había tomado la decisión de variar la gestión del hospital debido a las quejas de algunos servicios.

En concreto, aseguran que no se cubrían algunas bajas de médicos especialistas durante las vacaciones y los fines de semana.