BARCELONA 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los economistas catalanes prevén que la economía seguirá creciendo hasta final de año y recuperan niveles de confianza previos a la crisis, pero a la vez auguran que las desigualdades económicas seguirán creciendo en los próximos años, según la encuesta de opinión que realiza cada cuatro meses el Colegio de Economistas de Catalunya y que ha presentado este viernes en rueda de prensa.
En esta edición han participado 1.074 economistas (el 13,7% de los colegiados) entre mayo y junio, y el 60,8% cree que la situación actual de la economía catalana es mejor que hace un año, 11 puntos porcentuales más que en la encuesta de febrero y el mejor dato desde que se empezó a elaborar este indicador en 2001; el 32,5% cree que la situación es igual, y un 5,9% peor.
También aumentan los economistas partidarios de que la economía catalana seguirá mejorando a lo largo de este año, y el índice de confianza se ha situado en junio en valores de principios de 2008 en el caso de la economía catalana y al mismo nivel que junio de 2008 en el caso de la española, y para finales de año alcanza cotas de 2007.
PARO Y DÉFICIT FISCAL
El principal problema para la economía catalana sigue siendo el paro, según apuntan el 75,7% de los economistas --el mismo porcentaje que en febrero--, seguido del déficit fiscal de Catalunya con el Estado, con un 51,3% de respuestas, frente al 46,6% de hace cuatro meses; a continuación, la debilidad de la demanda interna, la situación política y la situación financiera muestran una evolución ligeramente a la baja.
Pese a las previsiones generales optimistas, un 71,7% de los participantes opina que en los próximos años crecerá el grado de desigualdad en la sociedad catalana, frente a un 23,2% que opina lo contrario, y el decano del Colegio de Economistas, Joan B.Casas, ha apuntado que la desigualdad va ligada al desempleo, y que para reducirla debe consolidarse la recuperación y ver qué políticas redistributivas se aplican conforme se van recuperando los ingresos en las arcas públicas.
Preguntado por la influencia del ciclo electoral, Casas ha señalado que la adaptación de las empresas a la crisis y su internacionalización las ha hecho menos vulnerables a la situación política, aunque pueden verse efectos el próximo año, cuando se constituya el nuevo Gobierno central.
También ha abogado por la creación de empleo cualificado y tecnológicamente actualizado, con salarios "homologables" a los europeos, ya que ha alertado de que, si España vuelve a crear puestos de trabajo de baja cualificación y remuneración, volverá a ser vulnerable en crisis venideras.
GRECIA Y TTIP
La encuesta también ha preguntado a los economistas sobre Grecia, y el 94,2% apoya que se reestructure su deuda, aunque vinculada a reformas: el 60,9% opina que los compromisos de pago se deben revisar a la baja, y el 33,3% que el Gobierno heleno debe pagar la totalidad de lo que debe.
Respecto al Acuerdo Transatlántico de Comercio e Inversiones (TTIP) que están negociando la UE y Estados Unidos, el 42,4% de los economistas está a favor y un 25,3% en contra, mientras que un 32,3% no tiene opinión, lo que Casas ha atribuido al desconocimiento, por lo que ha instado a llevar a cabo una labor pedagógica de explicación y divulgación "porque es un tema vital para el futuro que afectará las reglas del juego de la economía mundial" pero hay poca información.
SALARIO MÍNIMO PARA BARCELONA
El Colegio también incluye una pregunta específica para cada provincia, y en esta edición destacan las de Barcelona y Tarragona, de forma que un 58,9% de los consultados barceloneses se muestra a favor de que la capital catalana cuente con un salario mínimo más elevado por su mayor coste de vida.
Por su parte, un 56,1% de los economistas tarraconenses cree que los casos de corrupción de la zona afectarán a la recuperación económica local: un 31,7% opina que con un impacto importante y un 24,4% con una repercusión poco relevante.
En Girona costatan que el turismo ruso descenderá este verano por las tensiones geopolíticas y la devaluación del rublo, y en Lleida consideran que está creciendo la economía del conocimiento y la emprendeduría en la provincia.