El editor Jorge Herralde encumbra a Sharpe como un "maestro" del humor inglés

Tom Sharpe
ANAGRAMA
Actualizado: jueves, 6 junio 2013 15:05

BARCELONA, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -

El editor de Anagrama, Jorge Herralde, ha encumbrado como un "maestro" del humor inglés al escritor británico Tom Sharpe, fallecido la madrugada de este jueves a los 85 años en su domicilio de Llafranc, en Palafrugell (Girona).

En declaraciones a Europa Press, Herralde ha destacado que "escribía como si fuera una sierra eléctrica, con una ironía y sarcasmo inigualables", y ha augurado que sus 15 novelas seguirán vigentes por muchos años.

"Tenía una enorme rebeldía hacia las injusticias sociales y las denunciaba con un increíble humor", ha recordado el editor, que ha confesado que el trabajo de Sharpe que más admira es la novela 'Wilt', protagonizada por el profesor Henry Wilt.

Herralde, editor en castellano del novelista británico, ha recomendado la lectura de este trabajo con el que Sharpe alcanzó la fama: "Es una de las novelas más divertidas que he leído nunca. Es para retorcerse de risa", ha dicho.

Aún así, ha ensalzado los trabajos primigenios del autor británico, especialmente las dos novelas que escribió tras trabajar durante varios años como fotógrafo en Sudáfrica, lugar al que acabó "huyendo de su país, en el que se sentía incómodo por el sistema clasista y por su padre pro nazi".

"Esas dos novelas son increíbles farsas de humor negro que entrañan una salvaje crítica al régimen sudafricano", ha valorado Herralde, que ha añadido que las tesis de Sharpe eran muy eficaces y reveladoras pese a que huían de moralismos.

APARCÓ SUS MEMORIAS

Herralde ha explicado que Sharpe empezó a escribir hace tres años sus memorias, aunque las aparcó tras sufrir un ictus hace un año y medio: "Había escrito poco y encima no estaba satisfecho de ello", ha dicho.

"El hecho de no encontrarse bien le apartó de la escritura", ha lamentado Herralde, que aún así ha ensalzado el amplio repertorio literario del autor británico, que vivía en Llafranc desde 1995.

Decidió instalarse en el municipio gerundense tras vivir dos años en un hotel de la zona, después de que se lo recomendara una amiga: "Se enamoró de Llafranc, sobre todo por el contraste que supone con Inglaterra", ha afirmado Herralde.

También ha dicho que "aunque vivía en Catalunya desde hacía años no hablaba ni pizca de catalán ni castellano", por lo que todos los originales de sus obras los entregaba en inglés.