Encuentran las huellas fósiles más antiguas de Catalunya en Lleida

Icnita de la Vall de Manyanet asociada a un temnospóndilo
NSTITUTO CATALÁN DE PALEONTOLOGÍA MIQUEL CRUSAFONT
Actualizado: martes, 9 febrero 2016 19:31

CERDANYOLA DEL VALLÈS (BARCELONA), 9 Feb. (EUROPA PRESS) -

Investigadores de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), el Instituto Catalán de Paleontología Miquel Crusafont (ICP) y el Instituto de Ciencias de la Tierra Jaume Almera (CSIC) han encontrado las huellas fósiles más antiguas de Catalunya en la Vall de Manyanet, el Pallars Jussà (Lleida).

Corresponden a diferentes grupos de anfibios y reptiles primitivos, entre los que se han identificado huellas de sinápsidos, el grupo que más adelante dio lugar a los mamíferos, y se han hallado en dos ambientes diferentes: una zona fluvial de meandros y otra de aguas no confinadas, por esta razón los investigadores han determinado que sería el hábitat de tetrápodos (cuatro patas en griego) durante el periodo Pérmico --se inició hace 300 millones de años y duró 50 millones de años --, según ha informado la UAB en un comunicado.

En el área fluvial han detectado los antecesores de los anfibios, temnospóndilos, de diferentes tamaños y que desarrollaban una vida parecida a las salamandras, aunque para alimentarse succionaban la comida, otras especies cazaban como los cocodrilos actuales, además han encontrado rastros de animales en transición a anfibios que ponían huevos y otros con aspecto de reptil que podían llegar a ser de casi dos metros de longitud.

Respecto a los hallazgos en aguas no confinadas, se han observado un grupo de reptiles de tamaño medio con varias hileras de dientes que se extinguieron a finales del Pérmico y otros animales que podían llegar a tener cuatro metros de longitud y que presentaban una vela a lo largo de la columna vertebral, que no se ha podido determinar su función.

Han comparado las icnitas de la Vall de Manyanet con las que se han recuperado de lo que era el supercontinente, conocido como Pangea, en la época Pérmica, y han concluido que las diferencias faunísticas observadas pueden ser la consecuencia de climas diferentes.