Hereu dice que Barcelona está condenada al declive sin reforma de la Diagonal

BARCELONA 3 May. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, insistió hoy en pedir la participación a la consulta de la avenida Diagonal apostando por la reforma, y consideró el inmovilismo "como el principal adversario" de la ciudad, ya que como motor económico del sur de Europa perderá oportunidades si se deja la Diagonal como está.

"Una ciudad que niega a transformarse es una ciudad condenada al declive", defendió Hereu, aunque se mostró convencido de que "Barcelona no apostará nunca por el declive", agregó en su intervención que abrió la sesión 'La Diagonal, el porqué de una transformación' que organizó el Colegio de Ingenieros Industriales de Catalunya (Coeic).

En los últimos días se han multiplicado los actos sobre la consulta, que empieza en una semana, y que pone sobre la mesa tres opciones: reforma en paseo (A), transformación en rambla (B) y ninguna de las dos anteriores (C). El Gobierno municipal plantea tanto la A como la B con tranvía y autobuses rápidos, el Retbus.

Para Hereu, la Diagonal es "un diamante en bruto", y defendió que "Barcelona nunca ha desfallecido de su voluntad de transformación", ante lo que apostó por aprovechar el salto que hará la movilidad metropolitana para repensar la Diagonal, reducir la contaminación y tener una ciudad más cohesionada entre sus barrios.

Según él, "el área metropolitana no tendría ninguna duda de repensar la Diagonal", que tildó de calle mayor donde los habitantes del área metropolitana irán a pasear, y que puede convertirse en un gran eje de referencia, como ya tienen Nueva York y París.

El cuarto teniente de alcalde de Urbanismo, Ramon García Bragado, subrayó que el proceso supone reflexionar sobre 29 hectáreas del Eixample, y dijo que la transformación costará 70 millones de euros, a los que deben añadirse los 50 millones que calcula para la plataforma de transporte público, y que pagaría el operador de tranvía.

COSTE RAZONABLE

Bragado dijo que el presupuesto no es elevado, y que si se dividen los 70 millones entre los 290.000 metros cuadrados sale un coste por metro cuadrado "absolutamente razonable, del mismo importe que cualquier otra obra en cualquier otro punto de la ciudad", como la remodelación del paseo de Sant Joan, que empezará en junio, y la recientemente finalizada de la avenida Roma.

Destacó que las opciones A y B son "las mejores soluciones" de las 14 opciones analizadas, algunas de las cuales no alteran la posición de los árboles (como la A), algunas modifican una fila y se han mostrado "bastante ineficientes" y otras cambian las cuatro filas (como la B). También garantizó que cada vecino o comerciante no tendrá "más de siete u ocho meses" de obras entre su fachada y el arbolado.

El decano del Coeic, Joan Vallvé, deseó que Hereu vuelva al colegio y el presidente de la Asociación de Ingenieros Industriales de Catalunya, Joan Torres, ofreció la colaboración de los ingenieros para elaborar "el mejor proyecto urbanístico ganador", y que en la consulta estén presentes la adaptabilidad con que Ildefons Cerdà ideó el Eixample.

Torres lamentó que los ingenieros y otros profesionales están cuestionados por la Ley Omnibus, que les "niega los visados, y por tanto es la puerta abierta al intrusismo". Hereu replicó que deben flexibilizarse algunas estructuras pero "sin eliminar agentes sociales que tienen demostrado su papel".

También intervino el experto en movilidad Juli Garcia, quien repasó los criterios de movilidad de la reforma de la Diagonal.