Isaki Lacuesta explora la censura en la España democrática en una instalación

BARCELONA, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

El cineasta Isaki Lacuesta explora la censura en la España democrática, desde 1977 hasta la actualidad --incluso con un caso de semana pasada--, en la vídeo instalación 'Jo soc all prohibit' en el Centre d'Arts Santa Mnica de Barcelona: "No es una pieza de denuncia sino de reflexión sobre la censura, un tema candente que siempre lo ha sido".

En rueda de prensa este miércoles, Lacuesta ha remarcado que la censura y la prohibición nos describe como sociedad: "Tenemos un desconocimiento muy profundo de las leyes y los códigos. Hasta que no aparece 'La Manada' no tenemos idea de la diferencia entre agresión y abuso sexual, o entre rebelión y sedición, hasta la sentencia independentista".

A la videonistalación se accede por turnos y con un tiempo limitado, y ésta consiste en cuatro pantallas imposibles de ver al mismo tiempo, y cuya imagen se escurre ante la mirada, materializando que lo censurado escapa al ojo.

Para obtener este efecto, Lacuesta y su equipo han diseñado un software que reconoce adónde miran los espectadores para provocar que el espectador se vea forzado a engañar a la máquina y saltarse la censura para ver las imágenes, generando una "transmisión de responsabilidades".

Cuando el espectador se ladea, accede a imágenes que han sido prohibidas, denunciadas o censuradas en algún momento, "con cosas terriblemente obscenas, lamentables y patéticas", así como otros casos reivindicados colectivamente, entre los que no ha querido destacar ninguno.

En su selección hay casos de denuncias estatales y de empresas privadas, asuntos políticos y también otros "muy marcianos e insólitos", también casos graciosos, trágicos y tragicómicos, censura a proclamas fascistas, antifascistas, terroristas, feministas y antifeministas, entre otros.

TRES MOMENTOS DE AUGE

Lacuesta ha destacado que desde el inicio de la democracia ha detectado tres momentos de auge de la censura: de 1977 a 1981; entre 1998 y 2003, "años muy marcados por el miedo a una ETA muy activa y el atentado de las Torres Gemelas", y los últimos cinco años, donde se ha registrado un repunte.

Ha dicho que en los últimos años aparecen muchos casos vinculados al catolicismo, a asociaciones de abogados cristianos y a Vox, aparte de censura relacionada con Catalunya y una parte con el neopuritanismo "relacionado con la aparición de las redes sociales".

A su juicio, las redes sociales han aumentado la sensación de agravio y victimización de la población: "Todos nos quejamos de muchas cosas en público. Antes agobiabas a tu pareja y ahora agobias a la sociedad".

Ha dicho que si bien la censura es equiparable a la que puedan registrar Estados Unidos, Francia y Alemania, ha detectado particularidades, como por ejemplo el mayor número de prohibiciones católicas.

"Como sociedades nos tenemos que poner límites. Más que la existencia de la censura, lo inquietante es cómo se aplica", ha dicho Lacuesta, que ha registrado cierta arbitrariedad en su despliegue en casos similares.

BANDA SONORA Y EPÍLOGO

La videoinstalación tiene su propia banda sonora integrada por músicos de distintos estilos, que han cantado "cosas que no se pueden cantar en España" de la mano de Pau Riba, Maria Arnal, Albert Pla, Maria Rodés, Santi Balmes y Refree, entre otros.

Como epílogo, la exposición propone cuatro entrevistas en torno a la prohibición, una a David Jiménez, que explica lo que no se puede incluir en medios de comunicación, el abogado Benet Salellas, que propone lo que no se puede incluir en abogacía, el artista Pedro G.Romero, que reflexiona sobre la censura en arte, y Albert Pla, que desgrana sus casos de censura.

La directora general de Creación, Acción Territorial y Bibliotecas de la Generalitat, ngels Ponsa, ha dicho que esta exposición incluso incomoda y obliga al espectador a acostumbrarse a un nuevo lenguaje, y ha considerado que éste es el interés de la instalación: "Ser capaz de despertar conciencias de la nueva sociedad".