La separación de los alumnos en grupos de buenos y malos no es una medida eficaz
BARCELONA, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las niñas inmigrantes solamente corren más riesgo de sufrir fracaso escolar si son de primera generación --si han nacido en el extranjero--, según el 'Informe sobre el riesgo de fracaso escolar en Catalunya' del Consejo de Trabajo Económico y Social de Catalunya (Ctesc) presentado este jueves en La Pedrera de Barcelona.
Uno de los autores del informe, Jorge Calero, ha explicado que solamente las niñas de primera generación escolarizadas en Catalunya son más susceptibles de sufrir fracaso escolar que sus compañeras, algo que no sucede en el caso de los niños, que acusan esta condición de inmigrante hasta la segunda generación.
"Es una buena noticia que solo sea un factor negativo el ser inmigrante de primera generación, significa que los alumnos que han hecho un recorrido en la escuela catalana no tienen un 'handicap' en el riesgo de fracaso escolar", ha dicho.
Para Calero, este factor está relacionado con la diferente forma de implicarse de los alumnos y la alumnas en la institución escolar, "como el colegio tiene un efecto diferente en función del género".
En cuanto a la separación de los alumnos en grupos de buenos y malos estudiantes, Calero ha explicado que se trata de una medida con efectos negativos sobre los alumnos seleccionados en el grupo de los peores, mientras que los mejores sienten un efecto beneficioso, lo que hace que al final el efecto agregado de la medida sea "neutro".
A pesar de ser una medida ineficaz en la lucha contra el fracaso, Calero ha alertado de que la separación de los alumnos tiene implicaciones en términos de equidad entre los estudiantes, igual que ha rechazado la supresión de la sexta hora planteada por el Govern: "Sería malo porque supondría una desigualdad muy importante entre públicos y privados".
PRUEBAS DE EVALUACIÓN
En las conclusiones del informe, el Ctesc recomienda a la Conselleria de Enseñanza de la Generalitat 72 medidas a adoptar para luchar contra el fracaso, que pasan por la necesidad de la evaluación continuada del sistema y una detección precoz del riesgo.
"No se puede abordar el riesgo de fracaso al final cuando el alumno ya ha pasado por la escolarización", ha dicho el co-ponente del informe, Josep Maria Rañé, quien ha considerado que la prueba de sexto de Primaria debe continuarse haciendo.
