El número de clientes de moda de segunda mano ha crecido un 27% en dos años en Barcelona, siendo los precios económicos en un contexto de inflación, el prestigio de la moda sostenible y la creciente conciencia ambiental los principales motivos, informa la cadena Humana este miércoles en un comunicado.
La entidad catalana dedicada a la oferta de segunda mano ha anunciado la apertura de su tienda número 22 en la calle de la Portaferrissa de Barcelona (tiene 51 en toda España), que será la más grande de la cadena en esta ciudad, con 307 metros cuadrados.
El año pasado, Humana superó por primera vez el millón de clientes y prevé cerrar 2023 con un nuevo incremento, hasta alcanzar un aumento del 27% en los últimos dos años: "El público mayoritario es joven, la mayoría con conciencia social y ecológica", explica el director de Proyectos y Relaciones Externas de Humana, Rafael Mas.
Los artículos de las tiendas de Humana proceden de donaciones depositadas en los 1.400 contenedores verdes de la vía pública en toda Catalunya o en los que hay en el interior de los propios establecimientos, y se clasifican en la planta de preparación para la reutilización que la entidad tiene en L'Ametlla del Vallès (Barcelona).
UNA SEGUNDA VIDA
Humana destaca que la recogida selectiva tiene un gran potencial para prolongar su vida útil: el 90% tiene una segunda vida gracias a su reutilización y reciclaje.
"La gestión de estas prendas y calzado permite que vuelvan al mercado como moda sostenible y reutilizada. Este proceso tiene una finalidad social, ya que los fondos generados con la red de tiendas permiten la ejecución de proyectos de cooperación al desarrollo en países del Sur y acciones sociales en Catalunya", indica Mas.
La recogida selectiva y la gestión del residuo textil permitieron a Humana recuperar el pasado año 4.679 toneladas a Catalunya, el equivalente a 18,9 millones de artículos; esta gestión evitó la emisión de 28.546 toneladas de CO2.
