Lo fallará un jurado integrado por cinco especialistas
BARCELONA, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Premi Crexells de Novel·la del Ateneu Barcelonès regresará en su próxima edición "a los orígenes" con un jurado clásico integrado por cinco especialistas y sin participación popular, ha explicado este jueves en rueda de prensa el vicepresidente de L'Ateneu Barcelonès, Joan Maluquer, nombrado para repensar el premio tras desplomarse el pasado año por un cambio de criterio que motivó la marcha de los autores finalistas.
"Hemos decidido un retorno a los orígenes del premio. Nos supo muy mal lo que pasó", ha empezado explicando Maluquer, que ha incidido en que este premio es uno de los puntos axiales de la acción cultural de la entidad, y es una responsabilidad que no se puede eludir.
Nacido en 1928 como un premio con jurado clásico, la organización inició en el 2009 un proceso participativo en el que el jurado elegía unas obras y las sometía a votación popular.
El año pasado el jurado decidió sumar cuatro obras a los siete finalistas para superar la baja participación, conduciendo a una crisis que acabó suspendiendo el galardón.
"Se vio que el proceso participativo no satisfacía, y el jurado incumplió una de las bases nuevas del Crexells y hubo toda la retirada de los presentados", ha sintetizado Maluquer.
90 AÑOS DE PREMIO
Ante esto, la decisión de la nueva vicepresidencia ha sido volver a los orígenes "teniendo en cuenta que son los 90 años de la primera concesión del premio, un hecho notable", y frente a esto crear un jurado clásico, con una bajada en la media de edad --de 60 a 44 años-- y que sea diverso e integrado por profesionales sin muchos intereses evidentes en el mundo editorial.
La selección del jurado ha priorizado "que no haya intereses evidentes entre los miembros del jurado y la industria editorial", así como el hecho de que los integrantes son profesionales que siguen habitualmente la actualidad editorial, y tienen una idea de qué obra puede ganar.
Concretamente, conformarán la terna los periodistas David Castillo y Jordi Nopca, la escritora Ada Castells, la crítica literaria y librera Marina Porras y el profesor medievalista Joan Santanach, quienes harán que "quien gane el Crexells sea una referencia", y para ello tendrá una partida importante dedicada a la difusión.
Otra novedad será que no habrá comunicación de finalistas, sino que se comunicará el ganador directamente, ya que, sobre todo para los noveles, la lista de finalistas "crea cierta incomodidad".
Aparte de los 6.000 euros de dotación, habrá también un cambio en la escultura de obsequio: si anteriormente el premio era una escultura de Antoni Llena, a partir de ahora la obra será de Alicia Vinyas y estará financiada por el mecenas Joan Artur Roura.
El premio, que se concederá a la novela más destacable en lengua catalana publicada en 2018, fue creado en 1928 por el humanista, filósofo y traductor Joan Crexells y en la República se convirtió en el Premi Nacional de Novel·la; en 1939 el premio fue silenciado durante cuatro décadas.
