TARRAGONA, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha informado de que este miércoles se llevará a cabo una nueva crecida controlada aguas abajo desde el sistema de embalses formado por Mequinenza, Ribarroja y Flix, con el objetivo de frenar la proliferación de plantas acuáticas.
En un comunicado, la CHE ha señalado que el desembalse cumple el protocolo fijado con Endesa para intentar revertir el "fuerte desarrollo" de vegetación en el tramo inferior del río, y que en alguna ocasión ha llegado a afectar al funcionamiento de la central nuclear de Ascó.
Los desembalses se realizan normalmente en primavera y otoño, en función de los recursos, y se controlan para no causar problemas aguas abajo, ya que los efectos se dejan notar principalmente en el menado de Flix, Ascó y Vinebre.
A partir de Móra d'Ebre la laminación natural de la crecida disminuye su efecto, ha recordado la CHE, que intenta con esta medida el "efecto natural" de los caudales de crecida necesarios para evitar estas proliferaciones.
La CHE participa junto a Endesa, la Asociación Nuclear Ascó-Vandellòs (Anav) y expertos de la Universitat de Lleida (UdL) y de Girona (UdG) en un grupo de trabajo para estudiar el problema del avance de la vegetación en este tramo del Ebro.
