Pide disculpas si alguien se ha ofendido por la "contundencia" de las imágenes
BARCELONA, 27 May. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Interior de la Generalitat, Felip Puig, ha asegurado este viernes que la actuación policial de la mañana en el lugar de acampada de los 'indignados' en Barcelona no pretendía desalojarles, sino limpiar la plaza Catalunya y retirar objetos peligrosos --como bombonas de butano y de gas y hornillos eléctricos-- para reducir el riesgo ante la celebración de una posible victoria del FC Barcelona este sábado en ese lugar, y ha asegurado que los Mossos no intervendrán de nuevo antes del sábado.
En rueda de prensa en el Palau de la Generalitat, ha afirmado que se ha actuado con sentido común y prudencia, aunque ha habido, "sólo cuando ha hecho falta, contundencia" por parte de los mossos d'Esquadra, ya que primero han encontrado resistencia pasiva, pero después ha sido resistencia activa, para lo que ha recordado que 37 de los 121 heridos son policías.
Puig ha afirmado que no se arrepiente de haber ordenado la actuación policial, aunque se replantearía la hora de la intervención y el número de efectivos, y que entiende el "gran revuelo" y está dispuesto a asumir las críticas.
35 camiones de limpieza han retirado 500 metros cúbicos de objetos considerados "de peligro".
Para esa limpieza, a las 7 horas se ha permitido abandonar la plaza a quienes quisieran --se han quedado 300 de las 450 personas, ha dicho-- y se ha acordonado la plaza para que la gente no intentara entrar, pero en ningún caso ha habido una situación de retención, según Puig.
No ha sido hasta que los primeros camiones de limpieza no han podido salir que se ha producido "resistencia a la autoridad, alteración del orden público", y una de las líneas de contención se ha visto superada.
Puig ha destacado varias veces que hay 37 agentes heridos y que se han dado circustancias calificables de delitos de desórdenes públicos, de resistencia a la autoridad y de daños y lesiones, aunque solo se ha detenido a una persona, ya liberada.
En total, han participado unos 350 mossos y entre 80 y 100 guardias urbanos, y se han hecho 236 salvas de advertencia, seis disparos de pelotas de goma y 12 proyectiles.
DISPUESTO A IR AL PARLAMENT
Se ha mostrado dispuesto ha comparecer ante el Parlament para dar explicaciones, ha destacado que es el único responsable de las decisiones tomadas y que, durante la próxima semana, se analizará el dispositivo y se harán las críticas pertinentes.
Se incrementarán los efectivos previstos para la celebración de la hipotética victoria del FC Barcelona el sábado por la noche en la Champions League, aunque Puig se ha mostrado convencido de que la gente sabe que se ha actuado para disminuir el riesgo y que la gente pueda seguir manifestándose.
Entiende que haya gente que esté pidiendo su dimisión, y ha pedido disculpas si alguien se ha ofendido por la contundencia de las imágenes: "Somos los que menos queremos ver estas fotografías; ponen en riesgo el prestigio de un cuerpo".
"No me asusta que 10.000 personas pidan mi dimisión. Si hay algún error, ya lo asumiré", ha concluido Puig.
