Desoye a Ribó y no expedientará a policías por las cargas, que cree que no se excedieron
BARCELONA, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Interior, Felip Puig, ha desmentido este miércoles al Síndic de Greuges, Rafael Ribó, aseverando que una parte de las declaraciones que hizo al presentar su informe sobre las actuaciones policiales "no son ciertas" puesto que desde la Dirección General de los Mossos d'Esquadra contactaron con él el 10 de junio para que mediara con los 'indignados'.
La petición se hizo al adjunto general al Síndic, Jordi Sánchez, ya que Ribó estaba fuera de Catalunya, y finalmente desde la institución se negaron a hacer de intermediarios y lo comunicaron el 14 de junio, un día antes del bloqueo al Parlament.
Ribó había indicado que nadie se puso en contactó con él para pedirle tal mediación, aunque ahora Puig certifica que así fue.
Tras recibir el informe del Síndic, Puig ha asegurado que no tiene ninguna intención de abrir expedientes a agentes de los mossos d'Esquadra por las cargas contra los 'indignados' del 27 de mayo en plaza Catalunya, desoyendo la recomendación que le ha hecho Ribó.
En declaraciones a los periodistas, Puig ha sido rotundo aseverando que la operación policial "por descontado" obedeció al principio de proporcionalidad, después de que en su informe el Síndic argumentara que en algunos momentos la policía se excedió en el uso de la fuerza.
El conseller ha asegurado que no quiere entrar en polémicas con el Síndic, ya que considera que tiene el derecho y la obligación de hacer su informe y presentarlo con celeridad, aunque espera que en otros casos lo haga con la misma rapidez.
"No quiero entrar en polémicas con el Síndic. Con quien me tengo que enfrentar es con quienes alteran el orden público y la seguridad ciudadana", ha abundado.
Desde la Dirección General de los Mossos sí han realizado los informes e investigaciones sobre las operaciones del 27 de mayo y el 15 de junio, ya que, según Puig, "siempre se hace una revisión crítica" que sirve a su vez para introducir mejoras.
Ha admitido que tuvieron dos situaciones complicadas y ha recordado que en la primera, en plaza Catalunya, les acusaron de "pasarse de frenada", y en la otra, en el bloqueo del Parlament, les criticaron por quedarse cortos.
