Puig duda de los beneficios de la zona 80 y los tacha de "agitación de bandera política"

BARCELONA 1 Feb. (EUROPA PRESS) -

El conseller de Interior de la Generalitat, Felip Puig, ha cuestionado este martes los beneficios de la zona 80 esgrimidos por el tripartito y los ha calificado de una "agitación de bandera política" basada en estudios poco contrastados.

En una entrevista de TV3 recogida por Europa Press, Puig ha puesto en duda que con el límite a 80 en los accesos de Barcelona se hayan reducido las emisiones contaminantes: "Lo que no sé y se debe acabar de contrastar es la relativa y pequeña mejora que ha habido en los últimos años en algunos puntos de la red vial en la reducción de la contaminación".

Así, ha planteado que esta mejora en los índices de contaminación podrían deberse a otros condicionantes como la reducción del tráfico rodado a consecuencia de la crisis o el plan Renove --que ha mejorado la flota de vehículos--.

Sobre las cifras de mejora de la siniestralidad, ha advertido de que ésta también se ha producido en el resto de carreteras de Catalunya, y ha esgrimido que este 2010 la siniestralidad en estas carreteras aumentó un 27% respecto a 2009, cuando en el resto de Catalunya se redujo un 13%.

NIEGA QUE HAYAN INDULTADO PARTE DE LOS 80

Puig ha negado que con este nuevo mapa de velocidades que mantiene el límite a 80 en 25 kilómetros de la red vial hayan indultado una parte de la zona 80 y ha insistido en que la es una "modificación total" porque no hay ninguna carretera que antes de que el tripartito adoptara esta medida estuviera a una velocidad más alta de la que ahora.

"Los 25 kilómetros que se mantienen a 80 ya lo estaban antes de que el anterior gobierno implementara este límite", ha abundado el conseller, quien ha añadido que "lo que no se puede pretender es entrar por la Gran Via o por la Diagonal a 120".

CRÍTICA A LOS ÚLTIMOS PANELES INSTALADOS

El conseller ha cargado contra los últimos paneles de velocidad variable instalados por el anterior Govern en la AP-2 entre Martorell y El Papiol, porque allí se podrá ir a 120 kilómetros hora y no a 80, y sólo se regulará la velocidad en casos excepcionales

Ha defendido el coste de 76.000 euros del cambio de sistema porque deberán cambiar todas las señales fijas y ha hecho hincapié en que con lo presupuestado ahorrarán como mínimo un 25%.