BARCELONA, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Girona, Carles Puigdemont (CiU), ha explicado este jueves que pedirá una reunión a la ministra de Fomento, Ana Pastor, para proponerle adaptar el túnel subterráneo del AVE que atraviesa su ciudad al ancho de vías del tren convencional para usarlo para ambas líneas, y evitar así tener que esperar a construir un segundo túnel que ve "lejos, costoso y un problema para la ciudad".
Ha avanzado que el consistorio gerundense ha encargado un estudio para demostrar la viabilidad de la propuesta: "¿Por qué no ponemos el ancho ibérico a la línea del túnel de ancho internacional, y así nos ahorramos un segundo túnel que vemos lejos y costoso, y de paso un problema para la ciudad?".
La idea del alcalde sería hacer un 'bypass' entre las entradas norte y sur de Girona para que todos los convoys de ancho ibérico usen el túnel del AVE, de modo que también circularían por ahí los trenes de mercancías mientras no se construya el vial orbital que pasará por Salt.
"Temo y mucho por el calendario del tren convencional, y aquí tendremos un problema", ha espetado al justificar la propuesta, y ha asegurado que tener un túnel para el AVE y mantener el viaducto para el ancho ibérico y mercancías sería un negocio ruinoso, y más teniendo en cuenta el desgaste ya producido por las obras realizadas.
Ha dicho, en un desayuno-coloquio del Forum Europa, que se cree el cumplimiento del calendario de las obras de la alta velocidad, pero ha reconocido un posible desfase en la puesta en marcha de la línea Barcelona-Perpignan, y ha señalado el mes de diciembre como fecha de entrada en funcionamiento de la línea en las fases en que esté disponible.
Puigdemont confía en que el AVE mejore las perspectivas económicas de la ciudad, sobre todo por la reducción del tiempo de separación entre Girona y Barcelona, que será de poco más de media hora y que espera sirva de reclamo para las empresas.
"Tenemos el riesgo de convertirnos en ciudad dormitorio de clase media y no lo queremos. Con el AVE alguna empresa instalada en el Baix Llobregat o Vallès nos podrá mirar con distancia temporal y no kilométrica, y verá que tenemos una universidad y mano de obra con conocimientos", ha explicado.
Sobre la intención del Gobierno de recuperar el eje ferroviario central, ha asegurado que le preocupa muchísimo pero no le sorprende porque "es la España de siempre y forma parte del ADN de su administración".
"A alguien le sorprende? Obviamente me preocupa porque es una decisión completamente errónea", ha aseverado, y ha opinado que puede hacer perder tiempo, dinero y competitividad.
PACTOS "PUNTUALES" CON EL PP
Puigdemont ha asegurado que el debate sobre la soberanía catalana se ha desplazado de los extremos hasta la centralidad del país, a diferencia de la minoría que representan para él los defensores del autonomismo, y ha considerado normal que la cuestión independentista esté "ampliamente extendida" en las bases de CiU.
Pese a haber pactado los presupuestos del Ayuntamiento con el PP, cree que ello no tiene nada que ver con el debate independentista, y ha asegurado que busca las mejores alianzas sin prejuicios ni dudas democráticas.
"No pasa nada, son pactos puntuales y tiene que ver con el modelo socioeconómico que quieres", ha dicho, y ha añadido que con la CUP se siente muy alejado en este aspecto.
Sobre si tiene sentido la existencia de entes regionales como las diputaciones o consejos comarcales, el alcalde ha admitido que pueden gestionarse mejor y mancomunarse, pero ha sido tajante: "No hay que hacer un debate de trazo grueso y menos mirado desde Barcelona, porque la mayoría de ayuntamientos tienen la suerte de la ayuda y sensibilidad que les dan".
Puigdemont ha hecho balance en su intervención inicial de los siete meses y medio que lleva al frente del consistorio, en el que ha iniciado una "agenda del cambio" para poner de moda Girona y convertirla en una ciudad competitiva y que apueste por la tecnología.
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